Elvira Lindo se despide temporalmente de La Ventana: "Venir aquí es una ilusión casi infantil"

Madrid

Todo surgió durante el confinamiento. "Estábamos viviendo la pandemia y yo me puse a pensar en mi juventud y en la pandemia que asoló a finales de los 80, la del virus del sida", ha contado Elvira Lindo. Una pandemia diferente que, el palabras de la escritora, "sufrió el estigma" y "merece ser contada". La idea de que Lindo codirigiese la película junto con Fejerman surgió de manera imprevista: "Vi que Elvira estaba tan implicada que dije: 'No tiene sentido que acabe la idea en el guion'", ha referido por su parte la directora argentina.

La película empezará a rodarse el próximo mes de mayo y estará protagonizada por Magüi Mira, Emma Suárez y Aura Garrido. "Tenemos un elenco estupendo", han celebrado Lindo y Fejerman, que también se ha asomado a La Ventana. La historia está escrita, han reflejado, para ser una película. "Tiene musica y mucho paisaje. Las palabras están escritas para ser dichas por los actores".

Una mezcla de triunfo, fracaso y diferencias generacionales

La película se centrará en la historia de Nora, una actriz con un futuro prometedor, que hace equilibrios entre los dos pilares de su vida: su abuela Magüi, gran dama del teatro, y su madre Cecilia, que no pasa por su mejor momento profesional. Nora descubrirá que su madre guarda un secreto que la ha marcado de por vida.

Según ha contando Fejerman, la cinta tiene como base 'La Gaviota' de Chejov, y mezcla elementos como el triunfo, el fracaso y las diferencias entre generaciones. Una en la que, además, abundan las "cuestiones sociales".

"Nos damos fuerza la una a la otra"

"Nos damos fuerzas la una a la otra", han confesado. "Hemos empezado a trabajar juntas desde el primer momento". La clave, dicen, está en "compartir decisiones" y "ser muy democráticas". "Nosotras compartimos todas las decisiones y nos refrendamos", han explicado.

Una cuestión importante, de la que no puede presumir todo el mundo. “Creo que todos los novelistas podrían ser guionistas, pero deben de aceptar que todo el mundo les va a corregir". Una cura de humildad que, en el caso de Elvira, no ha hecho falta.