¿Quién está detrás del paro del transporte y qué reclama?

A Coruña

La vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño, y la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, se reúnen hoy con representantes del sector del transporte para buscar una salida al conflicto que paraliza el puerto y los polígonos industriales de A Coruña. El Puzzle busca respuestas a las preguntas sobre esta movlización.

¿Cuáles son los plataformas convocantes? ¿Qué representatividad tienen en Galicia y en España? ¿Quiénes la conforman?

El paro está convocado por la Plataforma para la Defensa del Transporte de Mercancías por Carretera. Es una entidad minoritaria, nacida en Galicia en 2007, pero que cuenta con el respaldo de una parte importante de los transportistas autónomos. La Plataforma no está representada en el Comité Nacional del Transporte por Carretera, que es un órgano consultivo en el que sí están las grandes patronales del sector. El Gobierno sólo negocia con este Comité y, por tanto, no ha negociado con los convocantes. El paro ha tenido gran repercusión en A Coruña porque ha secundado por dos cooperativas que trabajan en el puerto, Codebas y Transpuerto, que suman cien camiones. Cinco días después del inicio se sumó Ascentra, que representa a autónomos y pequeñas empresas y suma 300 socios en la provincia de A Coruña.

¿Estamos ante un paro, una huelga?

Esto no es una huelga. La huelga está reconocida a los trabajadores por cuenta ajena, por asalariados. Y las huelgas las convocan los trabajadores en asamblea o sus representantes. En este sector, los asalariados no han convocado ninguna huelga. Hay que tener en cuenta que es un sector muy diverso en el que nos encontramos prácticamente con todas las modalidades de relación laboral: asalariados, autónomos, cooperativas, pequeñas y grandes empresas. Y en estas ocasión son los autónomos y los pequeños empresarios (que no son asalariados) los que han parado.

¿Hay servicios mínimos?

No hay huelga, por tanto tampoco hay servicios mínimos declarados por ningún gobierno. Sobre la marcha, se ha ido estableciendo un diálogo, por ejemplo, para poder salida a pescado del puerto que estaba a punto de perderse. Las empresas también han pedido corredores seguros y que se garantice que puedan trabajar los que quieren trabajar.

Hemos hablado de un organismo a nivel nacional en el que se toman las decisiones, ¿cómo está conformado? ¿cómo se tiene representación en él?

Es el Comité Nacional del Transporte por Carretera, en el que están representadas las asociaciones mayoritarias del sector. Es un órgano consultivo dependiente del Ministerio de Transportes. Las entidades que quieren estar presentes en el Comité Nacional del Transporte por Carretera tienen que acreditar su representatividad ante el Ministerio para poder poder formar parte o renovar su participación. Esto está regulado por una orden ministerial.

¿Cuáles son las demandas que plantean?

La principal demanda tiene que ver con los costes de producción, que se han disparado por la subida del precio del combustible, registrada desde antes de la guerra contra Ucrania y agravada a partir de ese conflicto bélico. Lo que piden son medidas para paliar la subida de los carburantes, pero fundamentalmente la prohibición de que se contraten servicios por debajo de los costes de producción. Hay que tener en cuenta que los autónomos tienen más dificultades para trasladar las subidas a sus cliente, entre otras cosas porque muchas veces trabajan con intermediarios.

¿Paga lo mismo un transportista por un combustible que un usuario cualquiera?

Sí, pero. De entrada, pagan lo mismo, pero hay un mecanismo, conocido como gasóleo profesional, por el que se les devuelve parte del Impuesto de Hidrocarburos. Cuando pagamos el combustible, estamos pagando el producto, pero también impuestos, fundamentalmente el IVA o el Impuesto de Hidrocarburos. Los transportistas tienen derecho a una devolución parcial de este impuesto.

¿Cuáles están siendo las consecuencias más relevantes tras estos días de huelga?

Fundamentalmente el bloqueo del puerto y de los parques empresariales. Con su capacidad de movilización y los piquetes, los convocantes han conseguido prácticamente paralizar el transporte de mercancías por carretera. Esto implica que el pescado no tenga salida, tampoco la leche, que haya empresas que tengan serias dificultades para poder mover sus productos o recibir los suministros que les permiten desarrollar su actividad. En algún momento se ha visto también escasez en algún mercado, el algún lineal en concreto de algún supermercado. De momento, nada alarmante.