El PAC de Aranda soporta la mayor presión asistencial de toda la provincia

Aranda de Duero/Ribera del Duero

El servicio de Urgencias de Atención Primaria de Aranda es el más tensionado de toda la provincia. Así lo dice la estadística oficial de SACYL: en 2021 el PAC de Aranda atendió 32.555 consultas, con una dotación en personal que de forma habitual está compuesta por dos profesionales médicos y dos de enfermería. El PAC de Roa, atendido por dos profesionales médicos y uno de enfermería tuvo 11.791 consultas a lo largo del mismo año. El PAC de Huerta de Rey, que se queda fuera del horario habitual con un solo médico de guardia y una profesional de enfermería, atendió 3.022 consultas en 2021.

Lo que revelan estos datos es que cada médico del PAC de Aranda atendió una media de 45 consultas diarias, frente a las 16 de Roa o las 8 de Huerta de Rey. También supera las del PAC que concentra todas las urgencias de la capital burgalesa, en el Divino Vallés, cada uno de cuyos médicos de guardia atendió una media de 31 consultas diarias. El tercer PAC de la provincia con mayor número de consultas atendidas es el de Miranda de Ebro, que alcanzó las 23.227, casi 10.000 menos que Aranda.

El Punto de Atención Continuada de Aranda atiende no sólo a la capital ribereña, sino también a los 44 pueblos de Aranda Rural. Es el segundo que más consultas recibió el año pasado, después de que está en el Divino Vallés, que concentra las urgencias de toda la ciudad de Burgos, que está atendido de forma habitual por cuatro facultativos que a lo largo de 2021 atendieron 44.797 consultas.

¿En qué zonas hay más demanda de consultas de urgencias y en qué momentos de la semana y del día?

En cuanto a la frecuencia con la que los usuarios acuden a este servicio de urgencias de Atención Primaria los datos muestran una relación inversamente proporcional: cuánto más pequeña es una zona de salud y con municipios menos poblados y más dispersos, más acuden sus usuarios y usuarias a su centro de salud fuera del horario de consultas. En 2021 el PAC de Huerta de Rey atendió 2,28 consultas por cada tarjeta sanitaria, en Roa hubo 2,12 consultas de media por cada tarjeta, mientras que en Aranda no llega a una consulta por usuario, concretamente 0,75. En Burgos se desplona esta estadística con 0,24 consultas por cada usuario.

Para interpretar estos datos hay que tener en cuenta no sólo el criterio numérico de los habitantes de cada zona de salud, puesto que también entran en juego el envejecimiento de la población del medio rural, más afectada por pluripatologías y patologías crónicas.

También es llamativa la distribución de las consultas en función de los tramos horarios y del calendario: de forma generalizada las consultas de urgencias se concentran en las mañanas de los sábados, domingos y festivos, y en segundo lugar, pero con una diferencia notable, en las tardes cualquier día de la semana. Por poner dos ejemplos, en Aranda las mañanas de los días festivos se atendió una media de 84,4 consultas, frente a las 62,1 conultas de las tardes de los festivos y las 65,2 de las tardes de los días laborables. En Roa se atendieron 28,7 consultas de media en las mañanas de los festivos, 22,8 las tardes de losdías laborables y 15,8 las tardes de los días festivos. La experiencia de profesionales sanitarios indican que esta distribución de las consultas de urgencias no se debe tanto a que haya más urgencias en las mañanas de los días festivos, sino que este recurso se utiliza en ocasiones para patologías vanales o para saltarse la espera de las consultas ordinarias, de forma que se acude a urgencias para elegir a la carta un horario que le viene mejor al paciente.

El impacto de la pandemia

También llama la atención las diferencias que marcó el tiempo de pandemia: mientras el descenso de las urgencias de primaria en Aranda fue notable en 2020, con una caida casi del 20% (las 33.899 consultas de 2019, pasaron a 27.576) en Roa el comportamiento fue justamente el contrario con un incremento del 40% en las consultas de urgencias en 2020 (de 10.350 en 2019 a 14.077). En ambos casos 2021 se recuperó casi por completo los mismos niveles prepandemia, aumentando las consultas en Aranda y disminuyendo en Roa.

Un fenómeno que bien podría estar relacionado con el cierre de los consultorios locales en el medio rural durante el primer año de pandemia, ya que algo similar aunque no tan acentuado ocurrió en Huerta de Rey, donde el PAC atendió 2.935 consultas en 2019, en 2020 fueron 3.162 y el pasado año descendieron ligeramente hasta las 3.022.