¿Qué pasa en los centros culturales andaluces?
La firma de la jefa de Contenidos de Radio Córdoba
Cultura sin partidismo. La firma de María José Martínez
01:54
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1698950581737/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Córdoba
Este martes, el gobierno andaluz destituyó a Juan Antonio Álvarez Reyes como director del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC) de Sevilla. Una salida fulminante tras una fructífera gestión. Llegó a esta dirección en 2010 a través de un concurso y en aplicación del Código de buenas prácticas de museos y centros de arte, firmado en 2007 por el sector y el Ministerio de Cultura.
Un código que garantiza el acceso por méritos de los responsables de estos espacios, su desvinculación de los plazos políticos y con un proyecto artístico que marque su rumbo.
Ya se ha designado sucesora, sin concurso de por medio. Jimena Blázquez Abascal. Coleccionista, mecenas, comisaria, crítica e impulsora de la fundación privada Montenmedio Contemporánea, en Vejer de la Frontera.
No es la primera salida de un responsable contratado por concurso. En 2021, el Centro de Creación Contemporánea de Andalucía (C3A) en Córdoba se quedó sin director después de que no se renovara el contrato por concurso de Álvaro Rodríguez Fominaya, de gran trayectoria profesional. Sin nuevo proceso, el centro quedó bajo la tutela del CAAC.
Antes, en 2019, Rafael Doctor, director del Centro Andaluz de Fotografía, fue destituido dos años antes de que cumpliera su contrato. También por concurso.
En definitiva, está claro el cambio de rumbo de la política cultural de la Junta de Andalucía. Los centros no estarán gestionados en base a proyectos artísticos independientes. Parece que, de nuevo, volverá la 'dedocracia'. Y la cultura, amigas y amigos, no es algo accesorio, es un derecho que las administraciones deben garantizar. ¿Qué seríamos sin ella?
Los artistas no son "unos subvencionados", como dice el mantra de quienes no quieren una sociedad crítica. Hay cultura apoyada y promovida desde lo público. Pero a través de espacios libres, precisamente, para no obedecer a ningún interés. Porque es un derecho para generar una sociedad completa y formada. Está en la Constitución y en el Estatuto de Autonomía. La cultura no puede estar al servicio de los gobiernos. De ahí la importancia de ese código de buenas prácticas. La cultura expresa un momento, un espacio y una idea, futuro. Hay que defenderla sin sesgos políticos. La necesitamos.
María José Martínez
Directora de Informativos de Radio Córdoba. Mi trabajo mira especialmente hacia la igualdad, la sociedad...