Alivio en la Fundación Sánchez Vera de Cuenca por el derribo del edificio

Cuenca

Esta semana hemos conocido que el Ayuntamiento de Cuenca ha declarado en estado de ruina física inminente el edificio de la Fundación Sánchez Vera situado en la confluencia de las calles Tintes y Fray Luis de León de la capital. El Consistorio ha decretado que se proceda a su demolición inmediata para guardar la integridad física de las personas.

Pero, ¿qué sabemos de este edificio? ¿Qué es la fundación Sánchez Vera? ¿Cómo se ha llegado a este estado de ruina? ¿El inmueble tiene valor monumental y se perderá con el derribo?

El origen

El origen de esta fundación lo encontramos en 1941 cuando Ángel Sánchez Vera, hermano de Emilio Sánchez Vera, en que tiene la calle en el centro de Cuenca, compra el piso principal del edificio con la idea de ubicar ahí el Centro de Estudios Conquenses. Dos años después, en 1943, es el Ayuntamiento quien compra el resto del edificio y se compromete a “satisfacer para siempre jamás los gastos de conservación de todo el edificio”, incluida la parte comprada por el Sr. Sánchez Vera, que los poseerá en “usufructo vitalicio”.

El deterioro

Quince años después, a principio de los años 60 comienzan los primeros problemas sobre la estructura del edificio. En las décadas posteriores, la falta de compromiso de las administraciones, la venta de los apartamentos del último piso y de algunos locales de la planta baja, dejaron la situación como la vemos ahora: varios propietarios que se han multiplicado entre sus descendientes con la dificultad de ponerlos a todos de acuerdo o ni siguiera de localizarlos; dificultad burocrática para obtener permisos y afrontar alguna intervención de urgencia, con el Servicio de Patrimonio de la Junta de por medio. Mientas el tiempo pasa y causa estragos en el inmueble hasta llegar la orden de derribo por ruina física inminente.

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Alivio por el derribo

Los actuales patronos de la Fundación Sánchez Vera se muestran aliviados ante el anuncio del Ayuntamiento de Cuenca de demoler el edificio. Consideran que el estado en el que se encuentra es un riesgo para los viandantes y que la mejor opción es su derribo.

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Javier Semprún, patrono y portavoz de esta fundación, ha explicado en una entrevista en Hoy por Hoy Cuenca, que “la entidad está en proceso de liquidación y disolución”. El motivo principal es, precisamente, “la imposibilidad de recuperar el edificio”. La fundación es propietaria del 55%, “pero el resto se reparte entre decenas de herederos de los propietarios de los apartamentos del piso superior y de los locales comerciales”.

Ante esta situación, Semprún ha asegurado que “el derribo es ya una opción de alivio. Temblamos cada vez que hay viento o llueve”. Semprún, que está de acuerdo con la decisión del Ayuntamiento, sí ha pedido “que el proceso se haga con total transparencia”.

Decisión municipal

El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha manifestado respecto al derribo del edificio de la Fundación Sánchez Vera, “del que no se conservará la fachada”, que se han basado en todo momento “en los informes técnicos que alertaban de riesgo para la ciudadanía, y que por tanto había que evitar el peligro en todo momento”.

El alcalde ha señalado que está previsto que la demolición dure diez días y se ha estimado un coste superior a los 200.000 euros, si bien ha indicado que “esta cifra, que asumirá en primer lugar el Consistorio, es al alza y probablemente la cuantía final sea menor”. Por el momento no ha avanzado si posteriormente se reclamará el coste del derribo a los propietarios.