Let me go home
“Déjame ir a casa, déjame volver”

La mirada de Toledo: Let me go home (15/04/2025)
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Toledo
Buenos días, Carlos. Buenos días, oyentes.
Fue su abuelo el que le inoculó esa obsesión testaruda por las olas, los barcos y el salitre; una pasión casi enfermiza por el mar que le llevó a embarcarse con él durante meses en un balandro de mala muerte que hendía con bandera de Jamaica y fondeaba con el ridículo nombre de “John B.” siempre sin alejarse demasiado de la costa antillana de Nassau
Cuando al amanecer una tremenda resaca de ron y soledad le golpeó por dentro la cabeza, era incapaz de recordar porqué la noche había terminado en gritos, reproches y pelea y entre tanta nebulosa, sólo tenía una cosa clara: regresar, encontrar refugio. “Déjame ir a casa, déjame volver” se repetía entre sollozos hasta que entendió que nadie, sino él mismo le impedía el viaje de vuelta allá donde quisiera encontrarse.
“Let me go home. Why don´t let me go home?” Repite una y otra vez la canción tradicional caribeña que los Beach Boys versionaron para contar esta historia en 1966 y que titularon con el nombre del viejo barco, “Sloop John B:”
Los Beach Boys fueron mucho más que surf o rock de playa para niños bien de la costa oeste; aunque su música, atrapada entre el rock and roll y la música folk americana, no terminaba de encajar con el espíritu rupturista de los 70, Brian Wilson y su banda nos regalaron un ritmo y unas armonías vocales inolvidables que han marcado el camino de buena parte de la música pop. Eso, y unos falsetes perfectamente empastados que nadie ha conseguido superar.
Volver a casa. Buscar refugio. No se alarmen, no hablo de los atascos propios de estas fechas, ni siquiera del hecho físico de recorrer kilómetros y volver con la familia (o con quien sea). Mi intención, además de que disfruten de la música, es invitarles a que durante estos días busquen un hueco y se paren. Que detengan siquiera unas horas la jarana mental del día a día, la prisa para no llegar o el ruido que produce el agotador martilleo de eslóganes, noticias y mentiras.
Que vuelvan, aunque sea sólo un rato, al abrigo, al castillo, al hogar o a la isla de su cabeza en la que se refugian cuando lo de fuera se funde a gris y se torna insufrible.
El mío es la música, las canciones y las historias (a veces no tan ajenas) que hay detrás de ellas. “Sloop John B.” de los Beach Boys es uno de los caminos que transito hacia ese espacio protegido de ruido, reproches o ansiedad.
No sé por qué me ayuda, me transporta y me emociona. Y me encanta no saberlo.
“Let me go home”
Hasta el martes que viene. Besos.

Javier Mateo
Educador social y exconcejal del Ayuntamiento de Toledo.