Y que por lo visto 22.0

Talavera de la Reina

Y que por lo visto ha muerto Ismael Sánchez de la Fuente sin darse mucha importancia. Se ha muerto un intelectual pequeñoburgués al que el negocio que tenía abierto en la calle Trinidad se le quedaba pequeño.

El destino le había encadenado a aquel modo de vida heredado de su padre, toda vez que su hermano Ángel marchó a Barcelona a convertirse en uno de los grandes periodistas catalanes.

La oficina de la calle Trinidad fue foco durante mucho tiempo de iniciativas culturales. Allí Ángel Ballesteros y Vicente Magaña pergeñaron Aulas de Poesía, allí los más jóvenes poetas como Alfredo Ramos, Antonio Rubio y Antonio del Camino compusieron la revista La Troje y tramaron la reedición facsímil de Rumbos.

Por allí pasaba un hombre de la cultura hoy completamente olvidado como Almiro Robledo. De allí Ismael lanzó al mundo obras de teatro, poemas variados, carceleras y mineras para el Festival de la Unión. Y de allí salían los chistes que se publicaban semanalmente en La Voz del Tajo.

Hasta la tienda llegaban las revistas teatrales de vanguardia porque el teatro fue una pasión contenida en el proyecto de El Candil hasta los últimos años de su vida. A día de hoy todo esto es olvido prácticamente.

Espero que su obra haya sido conservada por sus herederos porque merece una tasación académica. Otros, por mucho menos, tienen calles, rotondas y buena prensa.

Ismael era poco amigo de los saraos y eso se nota en los homenajes donde ya es difícil distinguir entre el erudito y el postureo. Descanse en paz.

Vamos, circulen.