El granizo se hace notar en la Ribera del Duero

Se esperaba agua, pero no tanta. Este miércoles la lluvia, y después el granizo, no cesaron en Aranda y la Ribera del Duero. La oscuridad acechó alrededor del mediodía y cubrió la comarca, dejando carreteras blancas -y en algunos casos también calles como es el caso de la principal vía de Gumiel de Izán- a raíz de las piedras caídas, que tocará comprobar si han afectado o no a los cultivos y la vid. La preocupación existe entre los agricultores y viticultores que tendrán que comprobar si hay o no daños severos.

También, como puede visualizarse en el vídeo cabecero, este granizo ha complicado la circulación en algunas vías, como es el caso de la A-1 a su paso por Milagros. En Aranda se han formado algunas balsas de agua que ha tenido que señalizar la Policía Local, y también se han producido algunas salidas de vía por este fenómeno meteorológico.