La historia -y los muchos cambios- de la Guardia Civil de Aranda

Aranda de Duero

Cada 12 de octubre se celebra en Aranda de Duero la fiesta de la Virgen del Pilar, patrona de la Guardia Civil. Y ante la cercanía de la fecha, en la SER hemos podido conocer su historia en Aranda y los continuos cambios de emplazamiento que tuvieron lugar hasta que el citado cuerpo se instaló -ya definitivamente- en sus actuales instalaciones. Cabe reseñar, en primer lugar, que la Guardia Civil se creó en 1844 y que un año más tarde de su fundación se asentó en Aranda. Su primera ubicación fue el Palacio Episcopal que se situaba en los Jardines de Don Diego.

Este emplazamiento duró cinco décadas a la Guardia Civil. Porque 'les echó' la Iglesia, titular de este inmueble. La intención del obispo era buscar una congregación religiosa que lo ocupase en usufructo y que así pudiera hacer una labor social y educativa en Aranda. El 20 de febrero de 1897, tras el acuerdo oportuno autorizado por la Santa Sede, se ocupó el edificio y su gran huerta por parte de la congregación de los Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María, más conocidos como claretianos, por haber sido fundados por San Antonio María Claret.

El cuartel, al Arco Pajarito

A raíz de que el obispado de Osma ganara el largo proceso judicial sobre la propiedad del antiguo palacio episcopal, se tuvo que buscar una nueva casa-cuartel para la guardia civil en Aranda, ubicándose finalmente donde ahora se encuentra el Centro de Día de personas mayores 'Arco de Pajarito'. Este inmueble se encontraba entre las actuales calle Cascajar, Francesillas y la plaza Arco Pajarito. En el subsuelo de este edificio se encuentra todavía una bodega tradicional de propiedad municipal que aún conserva el clarividente nombre de 'Bodega de las caballerizas', como queriendo recordar que allí se encontraban las cuadras de los caballos de la Guardia Civil. También aparece en algunos documentos como “Bodega del cuartel de Caballería”.

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Dos cuarteles simultáneos

Este cuartel, que a todas luces se quedaba pequeño pese a algunas ampliaciones que tuvieron lugar, propiciaron la creación de un nuevo cuartel que coexistió con este. Y como el Ayuntamiento no disponía de los fondos necesarios para construir uno de mayor tamaño o contar con un edificio de mayor amplitud que el de Cascajar, se optó finalmente por habilitar un cuartel también en régimen de alquiler. Se hizo un concurso público para buscar un edificio adecuado para tal fin y se adjudicó a Galo Rojo Ayllón, que ofrecía el arrendamiento del edificio de su propiedad situado en el número 6 de la calle de San Antonio.

Por otra parte, el cuartel de Cascajar se siguió utilizando durante muchos más años pero fue sufriendo un progresivo deterioro que disminuía sus condiciones de habitabilidad, tanto para los guardias como para sus familias, por lo que finalmente se derribó totalmente el edificio, quedando reducido a solar en noviembre de 1975. Este emplazamiento finalmente fue cedido por el Ayuntamiento, en virtud de acuerdo plenario de 30 de junio de 1986, a la Tesorería General de la Seguridad Social para que construyera un edificio con destino a los mayores de Aranda.

El nuevo cuartel

En un principio el consistorio planeó ceder unos terrenos -los que hoy día corresponden a la Estación de Autobuses- que finalmente no tuvieron tal fin. En sesión plenaria de 30 de diciembre de 1949 se acordó la cesión de terrenos de la calle Santiago, situados al pie de la carretera a Salas de los Infantes y el 18 de enero de 1957, Franco firmó el Decreto autorizando la construcción de cuatro edificios con destino a casa-cuartel. Además de la casa-cuartel de Aranda de Duero se incluía en el mismo decreto las de Artana (Castellón), San Rafael (Segovia) y Berchules (Granada).

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Este inmueble contaba con veinte viviendas que fueron ampliadas a cuarenta al construirse un nuevo bloque detrás del que ya existía, algo que empezó a utilizarse en 1975. Es la zona que se ha denominado como “cuartel nuevo”. Dicha ampliación se pudo realizar gracias a una permuta de terrenos realizada entre el Estado y el Ayuntamiento de Aranda de Duero, autorizada por el consistorio en sesión de 16 de mayo de 1972, siendo alcalde José Eugenio Romera Pascual. La parcela anexa al cuartel se planteó como posible ampliación del cuartel. Finalmente en 1983 se destinó para la construcción del nuevo juzgado.

La última ampliación

En julio de 2009 se licitó la construcción de un nuevo edificio para el Destacamento de Tráfico previa cesión del terreno por parte del Ayuntamiento, destinado a oficinas, garaje, dependencias auxiliares y vestuarios para dicho destacamento de la Guardia Civil. El nuevo destacamento queda distribuido en cuatro alturas, tres sobre rasante, ocupando una superficie total de 1.675 metros cuadrados construidos. El semisótano se destina a albergar el parque móvil del destacamento. La planta baja se distribuye en oficina de atestados, sala de recepción y zona de espera. El primer piso alberga oficinas, el despacho principal y el archivo, mientras que en la planta superior, con la mitad de superficie construida, alberga los vestuarios, una terraza y área de comunicaciones.

En definitiva esta es una historia que pone en relieve la evolución y los cambios de la Guardia Civil, pero también de la sociedad, y por ende, de Aranda. Puede reproducirse en el audio superior.