Docampo ya saca jugo a su plantilla

León

Las buenas vibraciones rodean a la Cultural. El equipo está en el mejor momento desde la creación de la Primera Federación y la hinchada vuelve a a creer después de semanas en el alambre emocional que en este punto de la competición cae del lado del optimismo. De puertas hacia fuera, ilusión, pero dentro del club, cautela. Es bienvenido este chute de energía que han traído los últimos resultados y, por consiguiente, el crecimiento en la tabla clasificatoria, pero en el Reino de León nadie eleva los pies del suelo. Ni un palmo. La liga tiene cinco grandes a los que será difícil descabalgar y a la Cultural le falta un gran triunfo para confirmar su candidatura. ¿Será este sábado en Balaídos?

Con todo, una de las conclusiones generales es que empieza a demostrarse que la Cultural tiene una plantilla extensa, más amplia de lo que ha podido parecer debido al ideal de Eduardo Docampo, poco dado a hacer cambios masivos en las alineaciones que, salvo modificaciones concretas, llegaron a recitarse de carrerilla en el Reino. Sin embargo, la primera semana de tres partidos ha ofrecido un nuevo escenario, sospechado por muchos. Las lesiones o la necesidad de descanso han permitido que futbolistas del nombre de Claudio Medina, Julen Castañeda o Cristian Pérez den una pincelada de su nivel. Claudio y Castañeda eran de los jugadores menos utilizados y el miércoles debutaron como titulares en casa con un rendimiento que gozó del halago general. El delantero marcó (suma 2 goles, los mismos que Obolskii) y el capitán dio un paso al frente, el mismo que se le pide en el día a día. El caso del lateral está encima de la mesa de la dirección del club, que estaba decidido a buscar en el próximo mercado otra alternativa a Joel López. El tiempo dirá si la convincente actuación ante el San Fernando supone un antes y un después para un jugador muy querido por la grada.

Hay más ejemplos del empuje de la "segunda unidad". Hacía tiempo que se esperaba de Alex Blesa un partido como el que realizó el valenciano entre semana, ese Blesa diferencial que defendía José Manzanera, su principal valedor. Las lesiones de Kevin Presa y de Solís, reservas de lujo en la pasada jornada, sirvieron de oportunidad para el valenciano, más entonado por detrás del punta, a pesar de su querencia innata a retrasar su posición para estar más veces en contacto con la pelota. En el enganche resultó indetectable poniendo la rúbrica con un brillante remate a gol. Incluso Fran Cruz entra en la dinámica de competición a la espera de esa ocasión que se le resiste, pero que, con Trigueros y Rodri fuera de combate y con Cristian al borde de la suspensión, puede ser inminente.

Docampo está de enhorabuena. A pesar del desigual reparto de minutos, la gestión del grupo ha sido la adecuada y, en la gran mayoría de los casos, los contrastados suplentes han esperado su oportunidad sin levantar la voz. Al mismo tiempo, es una señal de alerta para que los Saúl, Joel, Kevin, Solís u Obolskii no se duerman en los laureles. El plantel está enchufado, aunque al técnico aún le queda un reto: Íñigo Muñoz. El extremo bilbaíno fue en partidos recientes una solución ofensiva en las segundas partes, pero sin grandes resultados. De hecho, junto a Fran Cruz, Rodri y Das Chagas, es el único futbolista de campo que todavía no ha sido titular.