El PP de Palencia critica el fracaso de la nueva Ordenanza de venta ambulante del PSOE por falta de consenso y rigor jurídico

Palencia

El Partido Popular de Palencia ha criticado hoy que la Concejal de Impulso Económico, Judith Castro, haya presentado una nueva ordenanza de mercadillo "sin tener en cuenta la mayoría de las opiniones de los miembros de la Comisión, organizaciones empresariales y vecinos e incluyendo leyes derogadas.

Ante la falta de consenso, el PP ha solicitado que se quede sobre la mesa y se trabaje en una ordenanza favorable para los vendedores y los vecinos desde el diálogo.

Según los populares, la nueva Ordenanza de mercadillos que propone el PSOE no saldrá adelante por falta de consenso. Desde el Partido Popular, dicen ser conscientes de la importancia de la regulación de la venta ambulante "buscando, en todo momento, el beneficio de vendedores y vecinos de la ciudad" por eso han pedido al Equipo de Gobierno que se tomen en serio este asunto y tengan en cuenta las aportaciones de los miembros de la comisión de impulso económico para su aprobación.

En este sentido, lamentan que no salga adelante por falta de consenso, en especial en cuanto a las ubicaciones, ya que se ha solicitado por parte de los grupos de la oposición informes técnicos y alternativas para poder estudiarlas y no se conoce nada al respecto hasta la fecha. Los populares consideran que la nueva ordenanza no se ha trabajado bien ya que se estaba construyendo sobre normativa derogada como la ley 16/2002 de 16 de diciembre de comercio de Castilla y León que ya no está vigente.

"El texto incluye errores importantes que deben subsanarse". El Partido Popular pide al Equipo de Gobierno que estudie los mejores emplazamientos para el mercadillo escuchando a todos los colectivos y buscando el beneficio de la ciudad. Piden que gestionen con “empatía hacia los vecinos y los comerciantes".

Los populares además se han sorprendido cuando el propio PSOE podría haber sacado adelante la Ordenanza en la Comisión Informativa con el voto de calidad de la presidenta y han optado por no hacerlo, “siendo la prueba de que ellos mismos no creen en su propia regulación”.