Prudencia y alivio entre los alicantinos por desprenderse de la mascarilla obligatoria en el transporte público

Alicante

Ya no volveremos a oír más esta audición como pasajeros, al menos de momento.

Y en este primer día sin mascarilla obligatoria en el transporte público, los usuarios alicantinos estaban igualados entre quienes han decidido seguir llevándola, y quienes ven como un alivio poder subirse al tranvía o al autobús sin ella.

La imagen esta mañana es la de conductores de autobús con la mascarilla por debajo de la nariz, taxistas liberados de ella y pasajeros divididos.

Eso sí, el cubrebocas sigue predominando en el colectivo de mayores, más prudentes. "El virus está aún ahí" y ante las aglomeraciones, decían muchos de ellos, prefieren protegerse con ella. Para otros más despistados, enterarse de la noticia ha sido un alivio.

La medida se toma tras más de mil días en los que fue obligatoria, después de haber sido aprobada el pasado martes por el Consejo de Ministros en un momento en el que el impacto sanitario de la covid-19 está en mínimos de toda la pandemia.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, explicó que esta medida, que publica el Boletín Oficial del Estado (BOE) a primera hora, supone "un paso más" en la respuesta que ha ido dando España en función de la situación epidemiológica, aunque su uso seguirá recomendado en el transporte a personas vulnerables y a los que presenten síntomas de infección respiratoria.