Ignacio González: "Siempre hay rumores de dossieres"

Madrid

Novedades sobre el espionaje político en la Comunidad de Madrid. La Cadena SER ha tenido acceso al sumario sobre los seguimientos a Ignacio González que se instruye en el juzgado 47 de Madrid y alcontenido de las declaraciones judiciales del número dos de Esperanza Aguirre y del entonces gerente del Canal de Isabel II, Ildefonso de Miguel. El vicepresidente de la Comunidad de Madrid asegura que siempre hay rumores sobre la existencia de dossieres y reconoce que la Comunidad intentó averiguar cómo los detectives se enteraron de la agenda de su viaje a Colombia.

En sede judicial Ignacio González asegura que el círculo de personas que hizo ese viaje era muy limitado y que los datos los conocían sus secretarias, las del gerente del Canal y las del presidente de la sociedad en Colombia. El vicepresidente relata cómo por parte de la Comunidad de Madrid se hicieron gestiones para saber qué había podido ocurrir, se preguntó a sus secretarias y éstas aseguraron no haber hecho ningún tipo de comentario ni saber nada al respecto. González añade ante el juez, en dos ocasiones, que siempre ha habido rumores de la existencia de dosieres.

En cuanto al viaje, el vicepresidente de la Comunidad asegura que fue oficial, del 29 de agosto al 4 de septiembre de 2008, y que la delegación visitó Barranquilla, Cartagena y Bogotá además de las Islas Rosario. En la comitiva viajaban en total cinco personas: el propio González, el ex gerente, dos consejeros y el presidente de la sociedad en Colombia.

Sobre el dossier publicado en su día con los billetes de avión de su viaje a Johannesburgo, a preguntas del juez, González mantiene que es personal, paga el precio en metálico -8.000 euros- y le acompaña Enrique Sánchez, empresario contratista del Canal de Isabel II. Y en cuanto al video de espionaje en Colombia, a preguntas del magistrado José Sierra, González asegura no conocer ningún bufete panameño, en referencia a una secuencia del video donde, siempre según el dossier, la comitiva habla de transferencias bancarias y bufetes panameños durante un desayuno.

Vigilancia al vicepresidente

En el sumario también consta la declaración del entonces gerente del Canal de Isabel II, Ildefonso de Miguel, sobre el que también se elaboró un dossier sobre sus bienes y negocios y que formó parte del viaje a Colombia. De Miguel traslada al juez su convicción de que quienes les siguieron tenían conocimiento de cómo era el viaje. Desde el Canal, reconoce el ex gerente, se hicieron averiguaciones para intentar saber quién filtró la información puesto que la agenda no era pública y el número de personas que conocían los detalles del viaje era muy recudido al ser vacaciones.

Ildefonso de Miguel da más detalles sobre la visita a Colombia

Las fechas se eligieron en función de la agenda del presidente Uribe y en la delegación sólo fueron cinco cargos porque se consideró que tenían que ir las personas imprescindibles para mantener reuniones de alto nivel. Entre ellos, los dos consejeros que viajan en representación del Canal; José Manuel Serra, abogado del estado en excedencia y Javier Soler. La comitiva era "el núcleo duro de máxima confianza para los negocios en Latinoamérica". La agenda incluía entrevistas con autoridades de Barranquilla, donde el Canal tiene negocios, con el presidente de Colombia y algún ministro.

Sobre este caso, el entonces gerente y mano derecha de Ignacio González dijo al juez no saber si es algo interno de la propia Comunidad o hay intereses de otro tipo. En todo caso, muestra su convencimiento de que la vigilancia va dirigida al vicepresidente.

El consejero espiado

En sendas declaraciones judiciales, Ignacio González e Ildefonso de Miguel identifican en las fotografías del espionaje a Javier Soler, consejero que viaja en representación del Canal de Isabel II, según de Miguel. A pesar de que el vicepresidente de Madrid ha tratado de desmarcarse públicamente del ahora ex consejero, un acta policial instruida en el marco de la investigación, reveló que el Canal de Isabel II aparece como el cliente que habría contratado a una de las agencias de detectives implicada para investigarle en 2008.