La actividad física, principal herramienta para prevenir el dolor cervical

Las molestias cervicales ocasionadas por una sobrecarga de los músculos del cuello, en muchas ocasiones, trae como consecuencia dolores de cabeza. "El cuerpo humano está diseñado para el movimiento y el grave pro-blema que sufrimos es el sedentarismo: malas posturas laborales, excesivo uso de ordenadores... Nos están haciendo ir en contra de nuestra naturaleza y aceleran la aparición de este tipo de patologías", admite César Gimilio, fisioterapeuta y osteópata.

Probablemente, más de un día se hayan levantado con molestias en el cuello o simplemente noten tensión muscular en la zona que lo rodea. "En la mayoría de los casos no es grave, suele ser el resultado de una sobrecarga de los músculos del cuello o consecuencia de una lesión traumática. Un latigazo cervical, por ejemplo, se produce cuando sufrimos un accidente de tráfico. También las vértebras cervicales y sus discos intervertebrales con la edad se desgastan y es normal padecer rigidez y disminución de movilidad. Más de la mitad de los mayores de 50 años tienen molestias y dolores más o menos crónicos. Por otra parte, los malos hábitos posturales y la inactividad física son los que generan más consultas en el fisioterapeuta", admite Gimilio.

Alrededor de 10 millones de españoles sufren dolor cervical o lumbar. Al menos uno de cada cuatro padece esta patología. Cuando la cervicalgia aparece no suele venir sola, dos acompañantes frecuentes y muy incómodos son los mareos y los dolores de cabeza. "El 90 % de la población los ha sufrido en algún momento de su vida. La rigidez articular, los espasmos musculares y a tensión miofascial van a generar una influencia negativa en la vascularización craneal. Los vasos principales afectados a nivel arterial van a ser las arterias vertebrales y carótidas y la vena yugular interna. Además de importantes estructuras nerviosas como el nervio vago, que van a producir alteraciones como nauseas y mareos. El dolor retrorbitario, el frontal y suboccipital van a ser los signos más destacados. Realmente, aunque es muy compleja la etiología de los dolores de cabeza está demostrado que el trabajo manual sobre la región suboccipital va a descongestionar la cabeza en gran medida a nivel vascular", admite César Gimilio.

El dolor cervical nunca suele venir solo, también hay otras patologías como el bruxismo (cuando tenemos mala oclusión dental), las hernias discales o la ansiedad que lo provocan. Esta última juega un papel importante en la aparición de las migrañas y los dolores cervicales. "Hay que valorarla en gran medida. Una persona que sufre estrés malo como el emocional, está sometida a una irritación constante de su sistema nervioso y esto da como resultado una hipertonía crónica de la musculatura. Si nuestros músculos están en tensión todo el día, acabará apareciendo la lesión", señala nuestro experto.

La clave para la prevención es la actividad física. "El cuerpo humano está diseñado para el movimiento y el grave problema que sufrimos es el sedentarismo: malas posturas laborales, excesivo uso de ordenadores... Nos están haciendo ir en contra de nuestra naturaleza y aceleran la aparición de este tipo de patologías. Debemos mover el cuerpo. Acudir al osteópata nos va a ayudar a normalizar biomecánicamente nuestras estructuras vertebrales y musculares. La medicina preventiva es la más importante", recomienda.

Si la persona acude a un gimnasio o decide contratar un entrenador personal es importante informarle si se padece este tipo de patología antes de empezar un programa de ejercicio. Cuando empiezo a trabajar con mis clientes, algo que hago siempre es preguntarles si tienen algún tipo de dolor de estas características para intentar sobrecargar esa zona lo menos posible y a través del ejercicio trabajar la corrección postural.

Pero más allá de todo esto, cuando tenemos molestias cervicales, lo recomendable es "un trabajo multidisciplinar. El paciente debe acudir a su traumatólogo, ya que un correcto diagnostico va a ser determinante en la recuperación. Un psicólogo ocupa un lugar a destacar en el tratamiento, porque siendo la ansiedad una causa primaria es importante que la persona tenga herramientas para poder superarla. La actividad física y la osteopatía juegan un papel clave, ya que liberará las zonas que están causando la lesión", afirma Gimilio.