Confuso incidente en el sur de la ciudad

Ávila

Sobre la siete y cuarto se ha recibido una llamada en la sala del 091 adviertiendo de que había una discusión entre personas de etnia gitana  en la zona del paseo de San Roque. Según los testigos, los implicados iban en dos coches, un Renault Megane y un Mercedes. En uno viajaban cuatro personas y en el otro podría haber al menos tres.

Según la información facilitada por el comisario provincial de la Policía Nacional, José Luis Tejedor, cuando han llegado las patrullas ya no había nadie en ese lugar. Se dirigen entonces hacia la avenida de la Juventud, ya que se reciben llamadas alertando de que se habían escuchado disparos en esa calle.

Cuando han llegado al edificio ubicado en la confluencia entre la avenida de la Juventud y la avenida Juan Pablo II, han encontrado a varias personas peleando.

Se ha establecido un operativo con cuatro patrullas de Policía Nacional y otras cuatro de Policía Local que han cortado varias calles alrededor del edificio donde viven los protagonistas del incidente.

Desde los balcones de una de las viviendas, en el segundo piso, se podía ver como varias personas se asomaban gritando todo tipo de amenazas dirigidas a personas que se encontraban en otra de las viviendas.

El dispositivo policial se mantuvo hasta las nueve de la noche. A esa hora se abre la zona al tráfico y se quedan solo dos patrullas para vigilar la zona durante la noche.

Según ha explicado el comisario provincial de la Policía Nacional, José Luis Tejedor, "tras inspeccionar la zona, lo policías no ha encontrado evidencias de que se hubieran producido disparos. Ni impactos, ni casquillos, ni ningún testigo presencial que corrobore que se han producido disparos".

No se conoce la causa de la pelea. "Es muy dificil saber porque ellos no lo dicen. Consideran que arreglan las cosas entre ellos.. Dicen que no ha sido nada, una chiquillada".  Sobre los gritos amenazantes que se han escuchado por parte de varias personas que se asomaban a uno de los balcones del edifico ha dicho que "tienen un carácter un poco exaltado y al final se queda en las voces. Los famiiares de uno de los implicados vocean...pero en principio son voces, nada más".

"Me gustaría que no se alarmara demasiado porque realmente no hay motivo de alarma" ha añadido.  Considera que el incidente no tiene que ver con lo ocurrido el pasado 10 de marzo en ese mismo barrio.