El Grupo Layna se desvincula de todo lo ocurrido en el incendio de Chiloeches

Chiloeches

El Grupo Layna, que alquiló la planta de reciclaje quemada en Chiloeches durante un año (entre marzo de 2015 y marzo de 2016), se ha desvinculado de todo lo ocurrido en torno a este importante suceso y a la gestión y el tratamiento ilegal de residuos peligrosos.

A través de un extenso comunicado de prensa, el grupo se declara “víctima de unas actuaciones fraudulentas desarrolladas por terceros”, a los que acusa de “aprovecharse de su imagen comercial y recursos económicos para cometer varios delitos y malas prácticas que se encuentran bajo investigación policial”.

Layna explica que alquiló parte de esa planta de Chiloeches a Kuk Medio Ambiente durante un año (de marzo de 2015 a marzo de 2016) y que esta empresa “le ocultó la existencia de expedientes sancionadores y el apercibimiento de suspensión por la mala gestión de los residuos tóxicos y peligros”.

Señalan además que ese engaño se produjo “gracias a trabajadores infiltrados en el grupo que falsearon documentos, utilizaron firmas de forma ilegal y llegaron a realizar incluso un borrado integral de los ordenadores”, motivo por el que rescindieron el contrato de alquiler con Kuk y pusieron los hechos en conocimiento de las autoridades tanto de Castilla-La Mancha como de la Comunidad de Madrid.

En el comunicado, el Grupo Layna insiste en que no ha sido nunca el propietario de las instalaciones del polígono Albolleque y detalla todas las actuaciones que ha llevado a cabo para denunciar las malas prácticas por parte de Kuk medio Ambiente.

En este sentido, destacan que, después de presentar las denuncias ante el Juzgado y el SEPRONA, han sufrido incendios en sus instalaciones tanto en Alcalá de Henares (el 3 de julio) como en el polígono La Vega de Chiloeches (el 15 de septiembre). Precisamente, respecto a este último incendio, Layna señala que parece que fue provocado porque la puerta estaba forzada.

Lee aquí el comunicado íntegro de la empresa.