El espectáculo de Mongolia utiliza una imagen de la Patrona con los rostros de Trump y Hillary

Cartagena

En un comunicado hecho público por la formación política de Movimiento Ciudadano han expresado su rechazo a este tipo de trucos de promoción irreverente, que solo persiguen, según denuncian, generar polémica para atraer a más espectadores, sin aportar con ello ningún otro mensaje de fondo.

En el escrito se apunta que” la democracia garantiza y protege en muchos casos este tipo de prácticas, en pos de la defensa de la libertad y, más concretamente, de la libertad de expresión”. “Esta última debe ajustarse a un mensaje, algo que expresar, porque de lo contrario queda reducida a una mera ofensa sin más sentido que generar escándalo y el morbo que le acompaña”.

MC entiende que el respeto es un valor básico en democracia, y por tanto, del mismo o de mayor nivel que la libertad de expresión, porque sin respeto al otro no hay libertad.

Esta formación política muestra su repulsa por estas prácticas que dicen, ofenden a una parte de la ciudadanía, y que en su opinión son absolutamente innecesarias exigiendo que sea retirado el cartel que utiliza a la Patrona de Cartagena de forma tan irrespetuosa.

El musical está de gira por toda España y Sonora que es la que ha alquilado el Nuevo Teatro Circo para la representación del mismo ha dicho en declaraciones hechas a Radio Cartagena que ellos no lo habían programado y que tan solo se alquiló la sala a una promotora de espectáculos.

Apuntan también que este cartel lo hicieron ayer, siendo distribuido por todas las redes sociales supuestamente, para provocar y conseguir que se hablara de ellos, como al final han conseguido.

Radio Cartagena ha hablado con Edu Galán, uno de los fundadores de Mongolia, que ha restado importancia a este incidente.

El presidente de la Comunidad Autónoma Pedro Antonio Sánchez ha hablado del mal gusto y la provocación ofensiva. "Este cartel -ha dicho- es sencillamente impresentable. No podré ir..."

El obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes ha rechazado este tipo de prácticas en las que se "ridiculizan" imágenes sagradas con fines ajenos o contrarios a la fe, al tiempo que considera que estas iniciativas "atentan contra los sentimientos más profundos de los creyentes y nunca pueden ser justificadas bajo una pretendida libertad de expresión". "Todo tiene un límite".