El 'Árbol del año 2016' está en La Adrada

Ávila

Un pinus nigra con más de 350 años de antigüedad que se encuentra en La Adrada (Ávila), ha sido elegido  'Arbol del año 2016' en el concurso convocado por 'Bosques sin fronteras', y será el representante de España en la edición europea del concurso.

Se le conoce como 'Pino Aprisquillo' o 'Pino Cascalbo' entre los habitantes de La Adrada y de la comarca. Tienen una relación muy especial con este árbol que, con más de 350 años de vida, forma parte de la historia del municipio.

Con sus 43 metros de alto y los más de cinco metros de diámetro que mide la base del tronco, no pasa desapercibido.

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"Es un referente para los vecinos y visitantes de la zona, un ejemplo de fortaleza y resistencia, un ejemplar que ha sobrevivido a plagas, incendios y cientos de visicitudes", dice Roberto  Aparicio, alcalde de La Adrada.

Nueve árboles competían por el título

'Bosques sin fronteras' seleccionó nueve árboles singulares para que fueran votados a través de internet.

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Terminada la fase nacional ahora representará a España en el concurso 'Tree of the year 2017' que reconoce no solo la singularidad del ejemplar, o su singularidad, sino también la relación que los habitantes de la zona tienen con él.

El árbol más viejo de Bátaszék, en Hungría, fue el ganador del año pasado. Es un roble, también con más de 300 años, que los habitantes de la zona rocían con vino en una tradición para pedir buena cosecha de uva.

El representante de España en la pasada edición de 'Tree of the tear' quedó quinto, con más de 21.000 votos. Se trata de un pino roble de Canicosa de la Sierra, en la provincia de Burgos.

'Bosques sin fronteras' es una organización sin ánimo de lucro que tiene como objetivo promover la conservación de los árboles y que entre sus proyectos tiene un registro de árboles singulares en el que tienen catalogados más de 4.000 ejemplares.