"A mí MasterChef me ha cambiado la vida"

León

"A mí MasterChef me ha cambiado la vida". El cántabro y medio leonés David González es tajante a la hora de valorar su paso, con la perspectiva del tiempo, por el reality de cocina más popular de la televisión. Hace apenas medio año, recién expulsado del concurso que por aquel entonces todavía se seguía emitiendo, no se esperaba lo que estaba por venir. Entonces, según nos contaba en nuestro 'Hoy por hoy', su intención era volver a la normalidad, retomar sus estudios de INEF en la Universidad de León y "ya se vería" lo que depararía su carrera culinaria.

Sin embargo, una llamada de su juez en el programa Jordi Cruz lo cambió todo. El chef lo ha fichado para el equipo del restaurante ABaC de Barcelona. David ha cambiado así los fogones de la tele por los de unas cocinas que lucen dos estrellas Michelín y ha aparcado sus estudios para centrarse en su progresión como cocinero. "Me siento totalmente integrado en la familia de ABaC". Allí forma parte de la partida de frío, donde es ya el más veterano del grupo. "Hay mucha presión, no es como en la tele, ahí no hay margen de error, está en juego el nombre del chef" reconoce. A pesar de ello, asegura que el ambiente es muy bueno y que Jordi tiene poco que ver con el papel que interpreta como jurado en MasterChef "Hay veces que estamos con harina y te la esparce por la cabeza a modo de broma"

La 'manada' sigue unida

Tras el concurso David ha mantenido el contacto con muchos de los compañeros con los que trabó amistad, especialmente con los que como él se encuentran en Barcelona "Veo a Juan, Pablo, Natalia y Rocío. Con los dos primeros suelo quedar para ver MasterChef Celebrity. Nos cocinamos algo y vemos el programa juntos" El joven valora muy positivamente el esfuerzo que han realizado los famosos en los fogones "Es de valorar. Se superan cada día"

David ha vuelto estos días en a León para participar en varios bolos y shows cooking. Un 'excusa' reconoce para celebrar el cumpleaños de su hermana. La misma que le apuntó al casting y cambió su vida "Yo era un aficionado y mira ahora". De momento no se plantea abrir su propio negocio, lo ve muy lejano. "Queda mucho, no sé que será de mi mañana". Lo que no esconde es que está muy a gusto en León a la que además considera una ciudad muy atractiva desde el punto de vista gastronómico. Por eso cuando le preguntamos si se ve abriendo aquí su primer restaurante propio, se le escapa una carcajada más amplia de lo habitual.