Madrid garantiza una muerte digna por ley

Derecho a una habitación individual en el hospital. Derecho a morir en casa con cuidados paliativos. Derecho a estar informado y derecho a no estarlo. Derecho a rechazar un tratamiento aunque eso conlleve acortar la vida. Derecho a una sedación paliativa para morir sin dolor. Habrá psicólogos para atender al paciente y a su familia y trabajadores sociales.

El proyecto de ley regula los derechos de los pacientes y los deberes de los profesionales pero también les da seguridad jurídica ante las decisiones que tomen los primeros. Eso sí, aunque no lo recoge de forma expresa, la norma impide la objeción de conciencia por parte de los profesionales. Lo hace con esta frase: "Todos los profesionales sanitarios tienen la obligación de respetar las convicciones y creencias de los pacientes en el proceso final de su vida, debiendo abstenerse de imponer criterios de actuación basados en las suyas propias"

Cuando la norma entre en vigor tendremos la posibilidad de realizar nuestro testamento vital en cualquier hospital o centro de salud. Serán ellos los encargados de enviar nuestras últimas voluntades al registro de instrucciones previas. La consejería de sanidad tendrá que dar difusión a este derecho.

Los centros sanitarios, públicos y privados, tendrán que facilitar el acompañamiento de los pacientes en una habitación individual, para proteger y garantizar el respeto a la dignidad de la persona en el proceso de la morir.

La Comunidad tendrá que elaborar anualmente un informe sobre su implementación y el grado de satisfacción ciudadana.