
Conceden la protección internacional para el ciudadano kurdo de origen sirio con una hija nacida en Málaga
Sobre Shadi pesaba una orden de expulsión tras negarle el gobierno, en dos ocasiones, el estatus de refugiado

CADENA SER
Conceden la protección internacional para el ciudadano sirio residente en Málaga sobre el que pesaba una orden de expulsión tras negarle el asilo político.
Shadi tiene 32 años, es nacido en Kobane y, en 2012, huyó de su país como otras 300.000 personas que abandonaron esta localidad siria de mayoría Kurda, centro de batallas contra el Estado Islámico. En 2016, junto a su mujer, nacida en el Sáhara Occidental decide venir a España. A través del paso fronterizo de Melilla pide protección internacional el 28 de julio de 2016 alegando que temía por su vida y era objeto de persecución. En marzo nació en un hospital malagueño la hija de la pareja. El gobierno español le negó hasta en dos ocasiones el asilo político y ordenó su expulsión la primavera pasada.
Sin embargo Noemí Ouviña, la abogada de Shadi y su familia no se rindió y solicitó al Ministerio del Interior la protección internacional de toda la familia ante el riesgo que corren en sus respectivos países; y se la han concedido: "ellos lo que tienen reconocido es una situación de especial vulnerabilidad y, por lo tanto, se le ofrece una protección internacional según los convenios firmados por España. Ahora están en situación regular en España. Además la pareja de Shadi es nacida en el Sáhara con lo que es un pueblo con unas circunstancias especiales reconocidas en España por su situación de apátrida".
Sobre Shadi aún pesa la orden de expulsión pero queda suspendida, a partir de ahora su situación regular les permitirá trabajar e iniciar una nueva vida.
