Ágreda engrandece su patrimonio monumental con la adecuación del entorno de la Muela

Soria

La zona en la que se ha actuado se corresponde con la antigua alcazaba árabe que se localiza en el espolón de la Muela de Ágreda, en el extremo del denominado barrio moro.

En su entorno inmediato se encuentra el torreón de la muela recientemente restaurado, así como el arco emiral, junto al aljibe que dotaba de servicio al asentamiento árabe. Constituye el punto final de uno de los recintos amurallados con que cuenta la localidad de agreda, que gozan de la declaración de bien de interés cultural. Se trata de una zona con un alto valor cultural, ambiental y paisajístico, situada dentro del conjunto histórico de agreda, en su flanco este.

Como consecuencia del desarrollo de los trabajos, en las excavaciones han aparecido los pavimentos originales, que quedan vistos, de manera que se va a percibir con mayor claridad que la zona en su conjunto constituye un lugar arqueológico. En concreto, se han llevado a cabo los trabajos limpieza y desbroce de la zona así como la demolición de los cerramientos que delimitaban la zona, y ofrecían un impacto visual negativo al estar realizados con materiales y sistemas que no son propios de un conjunto histórico; consolidación de los restos de muralla que rodean el torreón.

Se trata de los restos que delimitaban un segundo recinto que rodea la torre de la muela. Se han recompuesto los muros, dejando previsto el drenaje y se ha consolidado la coronación de los mismos, de modo que queda garantizada su conservación. Se han empleado para ellos piezas procedentes de los derrumbes, así como otras piedras y mampuestos de idéntico origen, que estaban convenientemente almacenados, todo ello trabado con mortero de cal.

También se ha pavimentado el entorno del torreón con sistemas y materiales adecuados al lugar. Son pavimentos permeables, que no compiten con los aparecidos, enmarcados con piezas de madera tratada. Limpieza y rejuntado de los pavimentos aparecidos, instalación de protecciones (vallados, barandillas) que dotan de seguridad a la zona, dado el fuerte desnivel que presenta el espolón de la muela; instalación de iluminación de tipo ornamental, instalación de cartelería y señalización.

Se ha conseguido ampliar la zona visitable para el público en general, lo que permite divisar el importante patrimonio edificado, así como crear una zona de mirador hacia lo que fue la alcazaba árabe de la muela, el barranco del río Queiles y las huertas árabes tradicionales. También se ha avanzado en el conocimiento de la zona, ya que aparecen como consecuencia de los trabajos arqueológicos las primeras estructuras y pavimentos, que arrojan información de gran valor sobre el antiguo asentamiento árabe.