El juez da por finalizada la investigación por el 'caso Sala'

Alicante

El juez del conocido como caso Sala ha dado por finalizada la instrucción de la investigación por el asesinato de María del Carmen Martínez, la viuda del expresidente de la CAM, tras recibir la última de las pruebas: el informe del móvil y la tableta del único acusado, Miguel López.

Las partes tienen ahora cinco días para pronunciarse respecto a la apertura de juicio y presentar sus escritos de conclusiones provisionales, y tres días para interponer recurso de reforma, según la providencia a la que ha tenido acceso Radio Alicante.

El letrado del hijo de la fallecida, Vicente Sala, acusará de asesinato al yerno de esta, según las fuentes consultadas. También hará lo propio el fiscal José Llor.

Por su parte, el abogado de la defensa, Javier Sánchez Vera, también deberá presentar sus escritos al juzgado. Previsiblemente pedirá el sobreseimiento de la causa al considerar que no hay pruebas que incriminen a su cliente, como ya ha indicado en ocasiones anteriores.

Miguel López fue detenido basándose en indicios, sólidos, pero no concluyentes y además, tampoco ha aparecido el arma del crimen.

Los dispositivos

Tras casi dos años, la investigación ha llegado a su final tras conocerse el contenido de los dispositivos informáticos del único acusado. Era la última pericial que faltaba por aportar al juzgado. El próximo 9 de diciembre se cumplirá el segundo aniversario del fallecimiento de María del Carmen Martínez a consecuencia de recibir dos disparos en la cabeza en un concesionario de su propiedad.

La Policía ha elaborado un informe en el que concluye que "salvo mensajes de condolencias" por parte de algunos contactos, tras la muerte de Mari Carmen "no aparece referencia al crimen en ninguna conversación o chat. Ni con su pareja ni con familiares cercanos", algo que los investigadores califican de "incoherente" con el hecho de haber sido asesinado un familiar cercano.

En cambio, sí se aprecia de forma "terminante" la lucha interna de poder en el seno de la familia Sala y el "sentimiento de odio" que crece en el matrimonio entre López y Fuensanta Sala, hija de la fallecida, hacia su madre.

También destaca que para comunicarse, especialmente después del crimen, Miguel López usa otra aplicación móvil, Telegram, cuyo contenido no aparece, y se incide en que usaba otros teléfonos para "mantener cautelas" a la hora de comunicarse.

Con el testigo

Pero hay más. Los agentes consideran "de interés" el contacto permanente que mantiene el acusado con Jesús Tavira, más frecuentes con la escalada de tensión familiar y que "se corta" tras el crimen.

Jesús Tavira es propietario de un desguace y conocido de la familia, que el día del crimen estuvo en el concesionario y ya declaró ante la policía y el juez. Y a pesar de que su relación "no era demasiado estrecha" según declararon ambos en su momento, se intercambiaron 232 llamadas desde agosto hasta el 15 de diciembre del mismo año (solamente una llamada de un minuto después de la fecha del asesinato).