Sociedad

Rapaces de bosque, daño colateral de la banda marrón

El hongo que está pudriendo los pinos obligará a talar alguno de los pinares más viejos donde anidan las rapaces, especialmente el milano real en peligro de extinción

De izquierda a derecha y de arriba abajo: milano real, azor, águila calzada, gavilán, busardo ratonero y búho real / flickr

Bilbao

Prácticamente un tercio de los pinos de Euskadi están afectados por la banda marrón. Un hongo que está pudriendo los pinares y que va a obligar a tomar medidas drásticas como la fumigación o la tala. Una podredumbre y unas talas que van a traer consigo daños colaterales, los de los animales que viven en esos pinos, especialmente la rapaces de bosque y entre todas ellas el milano real.

La banda marrón está acabando con los pinares más viejos de entre 50 y 70 años, precisamente los que las rapaces de bosque usan para poner sus nidos. Según nos confirma Mikel Olano, guarda forestal en Gipuzkoa y experto ornitológico de Aranzadi, prácticamente todas las rapaces de bosque escogen estos árboles para anidar: el ratonero, el gavilán, el halcotán, la águila calzada o los milanos negro y real.

MIlano real volando y mostrando su característica cola ahorquillada / Flickr

Entre todas ellas, el milano real es la especie más amenazada. Catalogada como especie en peligro de extinción, la muga entre Gipuzkoa y Nafarroa, una de las zonas más castigadas por el hongo con afecciones de más del 60% de los árboles, presenta la mayor densidad de esta rapaz de toda Europa.

Todos los nidos localizados en este territorio, un total de 22, se ubican precisamente en pino, así que si se pudren o talan, la especie solo va a tener dos opciones: o bien estas rapaces optan por ubicar sus nidos en otras especies de árboles como robles, castaños o hayas; o bien estas aves de gran capacidad migratoria se desplazarán hasta otras zonas más favorables.

Picamaderos negro / seo.org

Si finalmente estas rapaces optan por irse, Euskadi perdería una de sus aves más emblemáticas y dejaríamos de ver esa rapaz de cola ahorquillada en nuestros cielos.

En la otra cara de la moneda, hay un ave a la que la crisis del pino está beneficiando: el picamaderos negro, un pájaro carpintero cuya población ha aumentado de manera significatoiva en los últimos años por el aumento de la madera podrida, donde le resulta mucho más sencillo encontrar las larvas e insectos que le sirven de sustento.

 
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