Joseba Goikoetxea, antifranquista, nacionalista y ertzaina

Bilbao

'La Ventana de la Memoria' dedica su espacio mensual al sargento mayor de la Ertzaintza, Joseba Goikoetxea, en el 25 aniversario del atentado que le costó la vida a manos de ETA.

'La Ventana de la Memoria' entrevista a Rosa Rodero, viuda de Joseba Goikoetxea, que destaca que "Joseba era una persona extraordinaria, al que le encantaba su trabajo y lo único que le podía quitar de su trabajo era su familia: sus hijos, que para él era lo primero, y yo era la reina". Entrevistada por Eva Domaika, la viuda de Joseba Goikoetxea señala que "no hay que olvidar el pasado, porque es lo que nos va a llevar a no cometer esos errores y a salir adelante".

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El programa incluye una semblanza del mando de la Ertzaintza asesinado por ETA, a cargo de Iñaki Anasagasti, que conoció a Joseba Goikoetxea trabajando en una editorial de libros como tapadera y luego en una botellería de Galdakao; por eso fue detenido y estuvo en la cárcel de Carabanchel y que salió a la calle con el primer indulto del Gobierno de Adolfo Suárez.  "Con él tuve muy buena relación, porque empezamos a organizar el PNV desde abajo", relata el jeltzale, que recuerda también cómo ambos fueron detenidos en un Alderdi Eguna.

Todas las voces coinciden. El asesinato de Joseba Goikoetxea marcó un punto de inflexión que sufrirían todos los agentes de la policía autónoma. Goikoetxea no había sido el primer ertzaina asesinado por ETA, cinco agentes habían muerto antes que él en enfrentamientos u operaciones, pero sí fue el primero marcado como objetivo y ejecutado friamente. Una ejecución que puso el punto y final a una estrategia que había empezado mucho antes, como recuerda para este programa Juan Mari Atutxa.

El asesinato de Goikoetxea provocó una respuesta de los propios agentes, espontánea, desde la base, con el movimiento Hemen Gaude. Nadie olvida a los ertzainas plantados frente al hospital de Cruces durante los cuatro días en los que Joseba Goikoetxea se resistió a morir. Una imagen que compartiría protagonismo después con el pebetero cuya llama recorrería los pueblos encendiendo un mensaje de apoyo a la ertzaintza y contra el terrorismo.

Tras Goikoetxea, ETA acabó con la vida de otros nueve agentes. En total, quince ertzainas asesinados por la organización terrorista en 27 atentados. Son las víctimas mortales, pero no las únicas. Entre 1990 y 2011, los ertzainas sufrieron 1.335 acciones de kale borroka, según recoge un informe realizado por el Instituto de derechos humanos Pedro Arrupe.

El programa termina con un tiempo para la reflexión, que firma Kepa Aulestia, sobre la memoria. "Todas las memorias son selectivas y, en esen sentido, engañosas. Pero hay memorias que no lo son. Memorias recreadas hasta un punto que no responden a un pasado propio o que llegan a manipularlo a modo de fabulación. Ocurre con la narrativa de aquellos a los que nunca les pasó nada, pero hacen suyo el sufrimiento de otros. Como cuando se habla de sufrimiento colectivo, a sabiendas de qué personas en concreto padecieron la violencia o como cuando se pretende transaccionar la memoria o la propia Historia hasta robarles todo su significado y, lo que es peor, su humanidad. Es lo que corre cuando se trata de olvidar el mal o banalizarlo y cuando una supuesta memoria traiciona el pasado para fomentar la desmemoria".