Política
Carril bici

El carril bici a Reocín incumple el PGOU de Torrelavega

El proyecto se realizó, además, sin solicitar informes que eran preceptivos

Polémico trazado en una de las rotondas afectadas / Joaquín Díaz Cadena SER

Torrelavega

En Torrelavega los carriles bici siguen siendo motivo de controversia. Fuentes municipales confirman a la Cadena SER que el recientemente inaugurado entre Torrelavega y Reocín no respeta lo establecido en el Plan General de Ordenación Urbana vigente en el municipio desde 1985.

En concreto el plan general, en su apartado 4.1 establece que para el dimensionamiento de un carril de dos direcciones se debe tomar “un mínimo de 3 metros anchura” una característica que este vial incumple en buena parte de su trazado por lo que para su construcción hubiera sido necesaria una modificación puntual del citado planeamiento urbanístico.

El carril bici a su paso por Julio Hauzeur / Joaquín Díaz

La noticia llega después de que la semana pasada el alcalde anunciase la paralización de los planes de reforma del carril bici del Bulevar Ronda, después de que la Cadena Ser desvelase que el proyecto anunciado por el concejal de movilidad, Javier Melgar, también contravenía ese mismo plan.

En el caso del vial que enlaza la capital del Besaya con Puente San Miguel la situación es más grave, puesto que para la realización del proyecto, desarrollado por la Consejería de Medio Ambiente y Política Social con la colaboración con la concejalía de movilidad, no se solicitaron informes que eran preceptivos para su construcción.

Según las fuentes consultadas, se establece que para proyectos de estas características es obligado pedir informes a cinco departamentos del ayuntamiento: urbanismo, medioambiente, bomberos, protección civil y policía.

La Cadena SER ha confirmado que al menos dos de esos departamentos no han informado sobre la obra, puesto que nunca fueron consultados y, de hecho a día de hoy, siguen sin tener conocimiento oficial de ese proyecto.

A todo esto se suma lo que según los expertos es una falta de criterio y rigor a la hora de establecer el trazado del carril en varios puntos, de forma destacada en las rotondas, o las contradicciones en las que incurre su señalización que choca en ocasiones con la prevalencia de otras señales, caso de los semáforos, cuya existencia se ha ignorado.

Ejemplo de señales contradictorias ya que el semáforo prevalece sobre el stop / Joaquín Díaz

Esas mismas voces apuntan al peligro que supone que grandes zonas de asfaltado se hayan pintado de forma uniforme aumentando el riesgo de que algunos vehículos, como las motos, puedan patinar en días de lluvia.

La construcción de este carril fue ya motivo de malestar y preocupación entre vecinos afectados por la reducción del ancho de las aceras y de las calzadas rodadas pero también de reproches desde algunos de los grupos de la oposición municipal que ha considerado que afecta a una de las principales vías de acceso a la ciudad, el paseo de Julio Hauzeur, generando una situación problemática ya que atasca su acceso al reducir su capacidad y dificulta el tránsito de vehículos de emergencia.

 
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