El fiscal Manuel Moix y el jefe de la Udef señalados como las personas que obstaculizaron el caso espías

Madrid

El juicio por el caso de los espías ha dado hoy un giro inesperado aunque, rebuscando en la hemeroteca, no es la primera vez que el comisario de Policía Jaime Barrado dice lo que ha dicho esta mañana ante el tribunal.

Acudía como testigo, es uno de los agentes que investigó los supuestos seguimientos a rivales políticos de Esperanza Aguirre dentro del PP después de que los hechos fueran denunciados.

Ante la Sala ha asegurado que tanto su superior en aquel momento dentro de la Udef como el entonces Fiscal Superior de Madrid obstruyeron la investigación para evitar que se conociera la verdad.

La Sala enmudecía: un agente de la Policía estaba denunciando una presunta obstaculización a la Justicia por parte de su jefe superior, Jose Luis Olivera y del entonces fiscal superior de Madrid, Manuel Moix.

Por eso el abogado defensor Javier Vasallo tomaba la delantera en el interrogatorio que iba subiendo de temperatura y obligaba a la presidenta a pedir tranquilidad.

Son declaraciones para una historia que no parece terminada porque habrá denuncia ante el juzgado de guardia de Plaza de Castilla.

En todo caso, la vista se ha seguido celebrando y la Audiencia Provincial ya ha señalado que la sentencia de este asunto incluirá los datos revelados por este agente de Policía por una posible deducción de testimonio.