García-Page cree que la candidatura de Pedro Sánchez para las generales "no se discute"

Cuenca

Nadie va a discutir la candidatura de Pedro Sánchez en las próximas elecciones generales. Así lo ha asegurado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que está convencido de que Sánchez ganará “con claridad” en la cita con las urnas el próximo 28 de abril.

En una rueda de prensa con alumnos de la Facultad de Periodismo de Cuenca, García-Page ha rechazado la posibilidad de que haya un proceso de primarias para decidir el candidato del PSOE de cara a las elecciones generales, porque considera que sería mandar “un mensaje absurdo” a la ciudadanía.

Ha asegurado que nadie va a discutir el liderazgo de Sánchez ni su candidatura a la presidencia del gobierno, aunque ha reconocido que está en desacuerdo con él en algunas materias.

Durante la conferencia, en la que García-Page ha contestado a las preguntas de los alumnos, ha anunciado que el gobierno de Castilla-La Mancha va a presentar dos recursos contra el último trasvase aprobado y por los planes de sequía que aprobó el Partido Popular. El presidente ha criticado la “injusticia” que supone el trasvase Tajo-Segura para la región.

Asimismo, García-Page ha recordado que los planes de sequía han ayudado a zonas de Murcia y Alicante, dejando fuera a grandes áreas de Castilla-La Mancha.

Asimismo, el presidente de Castilla-La Mancha ha confirmado que el Gobierno regional presentará ante la Unión Europea un recurso por los trasvases que se están produciendo. Considera que hay normas en Europa, de obligado cumplimiento en esta materia, y que nuestro país está yendo justo en sentido contrario.

Asimismo, también se ha referido a la construcción de autovías que quedan pendientes en la región, entre ellas la operación por la cual el gobierno de Castilla-La Mancha se comprometió a construir la autovía del Júcar, entre Cuenca y Albacete, y el gobierno central tenía que acometer la de la Alcarria, entre Tarancón y Guadalajara.

Un proyecto en el que quieren avanzar, aunque también ha advertido de que todo lo que se invierta va “en detrimento” de servicios públicos que el ejecutivo autonómico considera “prioritarios” como sanidad, educación o servicios sociales.