La capacidad de aparcar rencillas, seña de identidad de los primeros diputados de la democracia

Oviedo

La lealtad democrática, la altura de miras y la capacidad para negociar y pactar fueron rasgos que marcaron a los parlamentarios del año 1977, según han resaltado algunos de los diputados que fueron elegidos por Asturias para el congreso en aquella primera legislatura democrática. Su trayectoria ha quedado recogida en la obra “Los parlamentarios asturianos de 1977; la transición de la dictadura a la autonomía” que ha sido presentado en la Junta General del Principado, y que ha sido coordinado por el historiador Javier Rodríguez Muñoz.

A la presentación asistieron tres de los parlamentarios asturianos de los albores de la democracia: Emilio de las Alas Pumarino y Alfredo Prieto Valiente de UCD y María Izquierdo Rojo del PSOE. Esta última fue elegida diputada por Granada donde residía y aseguró que “la lealtad democrática e institucional” marcaron los diez primeros años de la democracia. “ Por encima de nuestras diferencias los políticos estábamos obligados a responder ante la ciudadanía con objetivos cumplidos y dejar de lado las inevitables rencillas”, añadió María Izquierdo.

En su condición de presidente de la Fundación José Barreiro, asistió también el avilesino Alonso Puerta que acabó expulsado del PSOE en 1981 por denunciar contrataciones irregulares en el ayuntamiento de Madrid. Fue elegido diputado por la capital española y recordó que aquellos parlamentarios consiguieron “la primera Constitución Española hecha por consenso” que calificó de “el hecho más relevante del siglo XX español” y lamentó que hoy algunos se excedan en las críticas hacia los logros de aquellos primeros diputados de la democracia: “ se pueden cambiar cosas de la Constitución para mejorarla; lo que no se puede es destruirla” .

Para el presidente de la Junta General del Principado, Pedro Sanjurjo que citó a otros parlamentarios ya fallecidos: Torcuato Fernández Miranda, Santiago Carrillo y Rafael Fernández , el ejemplo de todos ellos sería muy útil para los tiempos actuales: “problemas de distinta naturaleza pero que también requieren de grandes acuerdos imprescindibles para seguir progresando en libertad y en democracia”, dijo Sanjurjo.