Benicarló, Borriana, la Vall d'Uixó y Almenara inician las Fallas con la Plantà

Burriana

Fin de semana fallero en la provincia de Castellón. Borriana, La Vall d’Uixó, Benicarló y Almenara iniciaron ayer oficialmente con la Plantà de los monumentos falleros la celebración de sus fiestas, a las que pondrán el broche final el próximo martes, día de San José y del Padre, con la quema de las fallas. 

El gremi provincial d’artistes i artesans fallers de Borriana ha elaborado este año cerca de 265 monumentos falleros que se podrán admirar estos días no solo en las localidades falleras de la provincia, sino también en la provincia de Valencia. El presidente de esta agrupación, Vicent Chaveli, ha explicado a Radio Castellón que este año los artistas agremiados han elaborado más fallas que el año pasado y que el precio medio de los monumentos es de 20.000 euros en el caso de los grandes y 6.000 en los infantiles.

En Borriana ayer, viernes, se celebró la nit de la Plantà, hoy y mañana lanzarán la mascletà a las dos y este sábado, además, se realizará la entrega de premios de las Fallas 2019. El lunes será el Correfoc y la nit del Foc, y el martes se celebrará la festividad de San José con la ofrenda de flores y la cremà. La alcaldesa de Borriana es Maria Josep Safont.

Desde la Diputación de Castellón potenciarán las fallas de la provincia con la financiación de las bandas de música que acompañaránn a las comisiones falleras de Burriana, Almenara, Vall d´Uixó y Benicarló el día de la Ofrenda, el próximo martes. El presidente de la Diputación de Castellón es Javier Moliner.

Transporte especial

Además, Renfe ha programado en Fallas la circulación de trenes de Cercanías durante las 24 horas. El servicio inició el servicio especial anoche y estará en marcha hasta la madrugada del 20 de marzo. Renfe ha programado la circulación de 163 trenes especiales en la línea C-6, que une Castellón y Valencia, que se añaden a la oferta habitual de Cercanías durante Las Fallas. La mayoría de los trenes circularán en doble composición. En periodos de fallas los desplazamientos desde las poblaciones periféricas se incrementan hasta un 60 por ciento.