El plan renove de automóviles del Gobieno Vasco dispara las ventas

Vitoria

Escucha aquí el análisis que hemos realizado de la situación del sector de la automoción ante la crisis del diésel y la transición ecológica que afronta. Conversamos -entre otros- con el responsable de Faconauto -la patronal que integra las asociaciones de concesionarios oficiales de las marcas de turismos y maquinaria agrícola presentes en el mercado español- y con Fernando Rodrigo, de Economistas frente a la crisis, que apunta a la necesidad de realizar una transición justa del sector para evitar pérdidas de empleo y consecuencias negativas en el ámbito social.

La crisis del diésel ha provocado en el mercado español una bajada dramática de las ventas de automóviles desde finales del año pasado. Pero en este 2019, que seguía la tendencia a la baja, el mes de marzo ha dado un vuelco a la situación en el País Vasco. Mientras la media en España es de una bajada del 13% en el número de matriculaciones, en nuestra comunidad se ha producido un incremento del 30%.

El efecto es consecuencia del plan renove de vehículos que ha lanzado el Gobierno Vasco y que aporta ayudas a quienes compren un vehículo nuevo más eficiente y retiren -a su vez- de la circulación furgonetas de más de 7 años y turismos de más de 10. Raúl Morales, de Faconauto, alaba la medida del ejecutivo vasco.

Transición urgente

Que el sector debe transicionar hacia un modelo más respetuoso con el medio ambiente y con la salud de las personas es una realidad y -además- urgente. Lo aseguran expertos como Fernando Rodrigo, de Economistas frente a la crisis.

Basta con mirar los datos que aportan entidades como AEMET o la OMS: en España, el verano dura ya 5 semanas más que en los años 80 y la temperatura ha ascendido casi grado y medio. El impacto en la salud de la contaminación que provoca ese calentamiento ambiental es también escandaloso; en España anulamente mueren 50.000 personas como consecuencia de la polución.

Dice Rodrigo que la tecnología está perparada para afrontar esos cambios y de manera rápida. Lo que toca hacer es ponerse a pensar y tomar medidas para diseñar una transición justa en la que no solo no se pierda empleo sino que se pueda generar nueva actividad económica alrededor del entorno de movilidad eléctrica que viene a imponerse.

Las empresas se enfrentan a un reto de renovación y también la movilidad pública. El cambio debe hacerse, apunta Rodrigo, con el más amplio consenso de todos los agentes: ciudadanía, trabajadores del sector, organizaciones sindicales, empresas y administración.