A Córdoba le gusta la música Sefardí...si es gratis

Córdoba

La XVIII edición del Festival Internacional de Música Sefardí de Córdoba se clausuró en la noche de ayer con la actuación de Al'Fado. Un cuarteto de origen israelí que combinó la esencia de las tradicionales canciones en ladino (judeoespañol) con lo suntuoso del Fado portugués.

A las puertas del Real Jardín Botánico de Córdoba, el habitual escenario de este festival, se agolpaba una multitud fuera de lo usual en comparación con ediciones anteriores. Igual sucedió el miércoles, con la performance de Mom&Band, dos españoles que han fusionado los beats contemporáneos con las raíces de la música sefardí bajo el paraguas de la Electronic World Music.

Con unas previsiones que rozarían los 400 asistentes, las instalaciones del IMGEMA acogieron ayer a casi 600 personas entre el público, que tuvieron que acomodarse como pudieron. No obstante, salvo por la cola a la entrada, ningún asistente manifestó malestar. Al contrario: muchos de los primerizos reconocían el marco en que se desarrolla el festival como "incomparable".

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Rafael Pérez de la Concha, jefe de la unidad de Turismo y Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Córdoba, se muestra "enormemente satisfecho y agradecido", aunque reconoce "que por el desbordamiento de las previsiones puede haber público que no haya quedado completamente satisfecho". Lamenta, no obstante, que el "interés de la ciudad por la música sefardí haya despegado tanto cuando la entrada ha sido gratuita".

En ediciones anteriores, el acceso a los conciertos costaba 5 euros. Una entrada que además permitía la visita a las instalaciones ajardinadas del Botánico. "Los seguidores fieles del festival también están impresionados por la cantidad de asistentes este año e incluso algunos nos han transmitido que echan de menos cierta intimidad de las noches en el Jardín Botánico", detalla Pérez de la Concha. No obstante, matiza, "lo importante es llegar a más personas en cada edición, por lo que esta ha sido un auténtico éxito".

Es una situación que reabre el debate sobre la gratuidad de la cultura, la demanda de actividades o el grado de aprecio que la población tiene a actuaciones musicales de carácter original.

Al enorme impacto de esta XVIII edición, hay que sumarle que desde el martes hasta el viernes, el IMGEMA también acogía el festival de fin de curso de la Escuela de Músicos El Gato.

También han actuado, en este encuentro reconocido como el "festival oficial de la Red de Juderías de España", Diwan Saz, Daniel Martínez, Jesús Parra y el Hombre Folkíbero, Yayla Ensemble y Darash. Ahora las miradas se fijan en la próxima edición, para la que, asegura Pérez de la Concha, ya hay "90 grupos en lista de espera que nos envían su música para poder actuar". Por ello, ahora comienza el proceso de selección "puesto que estamos limitados a siete actuaciones por año".