Ocho de cada diez pobres atendidos por Cáritas ya eran pobres de niños

Murcia

Cáritas ha presentado hoy su balance de la atención realizada en la Región a lo largo de 2018. La acción diocesana se ha centrado este año particularmente en la atención a las familias. Unas familias en las que, según la memoria de Cáritas, se cronifica la pobreza y se transmite de generación en generación: el 80% de los pobres de ahora lo fueron también de niños.

Junto a esa atención a las familias, la reinserción laboral ha sido uno de los ejes fundamentales de la acción eclesiástica. A través de la cooperativa "eh! laboras" y sus programas de orientación e intermediación laboral, Cáritas ha insertado en el mercado laboral a 695 personas, un 33% más que el año anterior. La formación laboral se ha centrado, fundamentalmente, en el ámbito de la hostelería, la agricultura, la limpieza y el sector textil.

En total, estos programas y el resto de proyectos supusieron una labor de 2.873 voluntarios de la que se beneficiaron 72.441 personas y que tuvieron un coste de casi 10 millones de euros de los que un 45% corrieron a cargo de las administraciones públicas y un 55% de fuentes privadas. Ese porcentaje de financiación privada pretenden ampliarlo con una campaña de promoción ante la sociedad civil.