Una epidemia de sarna diezma la población de zorros en Asturias
El FAPAS alerta de que la especie es el principal depredador para plagas como la del topillo de las pomaradas
Oviedo
Una epidemia de sarna deja bajo mínimos la población de zorros en Asturias. Lo denuncia hoy el Fondo Asturiano para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS), que además advierte de las consecuencias indirectas sobre las plantaciones de manzanos: el zorro es el principal depredador del topillo que causa estragos en las pomaradas asturianas. El caso sirve a los ecologistas para denunciar hoy la “caótica gestión” de las especies salvajes por parte del Principado.
La sarna sarcóptica es una enfermedad mortal en el caso de los zorros trasnmitido por un ácaro muy agresivo. Paradójicamente hay muchos indicios que apuntan como origen de su propagación al ganado doméstico ya infectado que en verano pasta en las montañas. En cualquier caso ahora le toca al raposu, que según el FAPAS ha visto diezmada su población sin que a nadie parezca preocuparle a pesar de su papel clave en el equilibrio del ecosistema e incluso la suerte de algunas producciones agrícolas. El conservacionista Roberto Hartasánchez explica que los zorros son depredadores para especies que pueden llegar a suponer plagas, como el topillo que ha causado estragos en las plantaciones de manzanos. Dice Hartasánchez que "si se mueren los zorros habrá más topillos y los daños serán más grandes".
Los brotes de sarna son relativamente frecuente en las especies salvajes; hace unos años fue la población de rebecos la que sufrió su impacto. Sin embargo el censo de estas especies es una verdadera incógnita, y Hartasánchez vincula esa circunstancia con la gestión al respecto de las autoridades regionales en materia de Medio Ambiente. A la espera de poder juzgar al nuevo gobierno, lo hecho la pasada legislatura le parece un desastre. "La gestión de la biodiversidad y la fauna salvaje ha sido caótica", dice.
La infección de sarna en los zorros se ha propagado por toda la región. Otra razón más para preocuparse: se contagia a los humanos.