El cierre de entidades bancarias llega a los pueblos

Valladolid

El mundo rural, sigue perdiendo servicios y por lo tanto gente.

Ahora son las entidades bancarias las que han decidido cerrar y aplicar la banca electrónica, que no entiende ni sabe usar la población de mayor edad que vive en los pueblos. Y eso que la PAC, que llega a agricultores y ganaderos, supone más de 1.000 millones de euros, que gestionan las entidades bancarias o 2.600 que mueven las cooperativas.

Esta desaparición de oficinas en el caso de la Región afecta a 1.600 municipios, un 16% de la población, según un estudio realizado por la organización agraria COAG.

Las voces de alarma no se han hecho esperar. En algunas otras comunidades las diputaciones y los ayuntamientos intentan frenar este nuevo golpe al mundo rural. Y en Castilla y León ha sido la organización agraria Coag la que ha lanzado la voz de alarma y ha denunciado que el mundo rural, los pueblos de la Comunidad se están quedando sin este servicio.

Desde el inicio de la crisis financiera, primero se terminó con las cajas de ahorro, por la mala gestión de sus responsables y luego el resto de entidades bancaria han seguido el mismo camino de cierre, siempre mirando intereses economicistas.

En la Comunidad el número de oficinas bancarias se ha reducido un 42 por ciento y la población sin acceso a una sucursal en el municipio en el que vive ha crecido un 44 por ciento.

Eso supone que 1.800 municipios de la Comunidad de algo más de 2.200 no tienen una oficina bancaria, casi unas 400.000 personas. Algo más de un 16% de los habitantes.

 Desde COAG-Castilla y León se ha hecho un llamamiento a las entidades financieras con fuerte implantación en la Comunidad para que apuesten por mantener los servicios de proximidad a la población “y así mantener un tejido social y económico imprescindible para su supervivencia”.