Esta actuación en marcha en la vía entre Granada y Antequera confirma la muerte definitiva del tren convencional

Granada

La formación de los maquinistas retrasa un mes, como mínimo, la entrada en servicio de los trenes de alta velocidad que unirán Granada con Sevilla y con Málaga. Se baraja, como mínimo, finales de octubre o principios de noviembre.

Aunque Renfe quería comenzar el servicio de alta velocidad entre Granada y Málaga y Granada y Sevilla a finales de septiembre con trenes AVANT, todo indica que la fecha se retrasará como mínimo un mes, según han confirmado a Radio Granada fuentes cercanas a la compañía. Un retraso en la formación de los maquinistas de Renfe en Cataluña provocará que los trenes que actualmente prestan servicio en esta región lleguen más tarde de lo previsto a Granada.

Los maquinistas tienen que formarse en los trenes que sustituyan a los actuales. De esta forma, los AVANT llegarán a Granada y, de nuevo, los maquinistas de aquí deberán formarse, aunque el proceso dura pocos días. En cualquier caso, los tres enlaces diarios por sentido a Málaga y los cuatro con Sevilla tendrán que seguir esperando, como mínimo un mes más.

Tren convencional

La entrada en servicio de estas conexiones regionales de alta velocidad supondrá la confirmación de la muerte del tren convencional entre Granada y Antequera.

Curiosamente, ADIF lleva a cabo estos días la implantación en esta línea del sistema de seguridad BAU (Bloqueo automático en vía única), que permite que la línea funcione en todo el trazado con una sola vía. Eso significa, como avanzó en su día Radio Granada, eliminar los cruces de trenes en las estaciones de Atarfe, Pinos Puente, Tocón, Salinas y Archidona. Estos puntos quedarán definitivamente eliminados. La línea queda en mejores condiciones para prestar algún servicio aislado de mercancías, por ejemplo, pero queda definitivamente inutilizada para -por ejemplo- poner en marcha un servicio de cercanías o media distancia.

Por tanto. Ya es definitivo. La puesta en marcha de la alta velocidad con Málaga y con Sevilla; la declaración de servicio público de las líneas Granada-Almería y Algeciras-Antequera; y la instalación del nuevo sistema de seguridad, confirman la defunción definitiva del ferrocarril convencional entre Granada y Antequera.