El proyecto del acelerador permirtirá crear ya estos dos laboratorios sobre fusión nuclear en Granada

Granada

La Universidad de Granada creará de inmediato dos laboratorios de búsqueda de materiales para la fusión nuclear, uno de robótica y otro de control. Para ello preparará una sede -en principio- dentro de las instalaciones universitarias, dotará a ese espacio de la instrumentación necesaria y contratará a personal especializado.

La financiación de estos dos laboratorios, primer legado tangible del proyecto de candidatura para el acelerador de partículas, correrá a cargo de la propia Universidad de Granada gracias a los dos millones de euros recibidos directamente de la Junta de Andalucía como aportación al gran proyecto internacional IFMIF-Dones, que busca construir un acelerador de partículas en la localidad de Escúzar.

Los dos laboratorios para comenzar a trabajar con materiales para la fusión nuclear comenzarán a instalarse en pocos meses, según ha explicado a Radio Granada el director de la oficina de la Universidad de Granada para ese asunto, Antonio Peña.

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La oficina de la UGR que viene trabajando sobre este asunto desde hace dos años acaba de recibir financiación de la Comisión Europea para preparar la candidatura del acelerador. Se trata de cuatro millones de euros que servirán para preparar el consorcio institucional que otorgue entidad legal al proyecto, para buscar esa base legal, conseguir más financiación e implementar las primeras infraestructuras así como preparar cualquier aspecto técnico relacionado con el gran proyecto internacional.

Los dos laboratorios que se crearán en Granada en breve son fruto de la financiación directa de la Junta y del convenio de la Universidad con el CIEMAT, el máximo órgano científico-tecnológico del Ministerio de Ciencia. El CIEMAT es el último responsable del proyecto científico del acelerador aunque la universidad granadina coordina todos los preparativos.

Financiación e inversión

El director de la oficina del acelerador de la UGR, Antonio Peña, calcula que los seis millones de euros con los que ya cuentan las distintas patas del proyecto se multiplicarán en breve.

En tres o cuatro años, se podrá estar manejando un presupuesto de unos 70 millones de euros, lo que supondrá más infraestructuras científicas concretas en la provincia de Granada y contratación de personal especializado.

Aunque las perspectivas para la instalación del acelerador en Escúzar son excelentes (Europa compite para ello con Japón), todos los proyectos que ya están en marcha trabajan con una sola premisa: que todo lo que se ponga en marcha en Granada sea productivo desde el primer día. La inversión global, de conseguirse el acelerador, se sitúa en los 700 millones de euros.

La consecución del acelerador será espectacular para Granada. Si no se consigue, como habitualmente indica la rectora, Pilar Aranda, 'Granada ya ha ganado'. El acelerador es la meta pero el camino ya está creando riqueza en Granada y situando a esta tierra como polo internacional de la fusión nuclear, con infraestructuras que quedarán aquí implementadas y una tecnología de futuro que generará inversión y un gran movimiento científico.

Por una vez, y ojalá sirva de precedente, Granada trabaja con perspectiva histórica. A día de hoy ya se han puesto las bases de un futuro prometedor con repercusiones garantizas. El tiempo dirá si ese retorno para nuestra tierra será 'gigantesco' o, en el peor de los casos, solo 'espectacular'. Pero Granada ya ha ganado.