El consumo moderado de cerveza mejora la salud cardiovascular

Barcelona

Los antioxidantes del lúpulo, la malta y la cebada, que pasan a la cerveza durante el proceso de fermentación, protegen las células cardiovasculares contra el envejecimiento. Así lo ha concluido un estudio liderado por la doctora Lina Badimon, directora del ICCC Cardiovascular del Instituto de Investigación del Hospital de Sant Pau de Barcelona.

"El consumo moderado de cerveza puede asociarse con efectos positivos en la función de las HDL (el colesterol bueno), que aumentan su capacidad de proteger contra la oxidación producida por las LDL (el colesterol malo). Esto contribuye a evitar que se depositen lípidos en la pared del vaso sanguíneo y lo taponen "

El estudio se ha realizado con un grupo de pacientes con sobrepeso, pero las conclusiones son extensibles a toda la población. La investigación también ha demostrado que, manteniéndose dentro del consumo moderado, la cerveza no engorda, no sube la tensión arterial ni tampoco altera el hígado. En cantidades superiores, sin embargo, todos los beneficios se pierden.

"No se puede consumir una cantidad ad libitum de cerveza, toda la que uno quiera, porque la bebida tiene una composición alcohólica. Y esta composición alcohólica, si se consume en exceso, puede ser negativa", dice la doctora Badimon.

Los efectos beneficiosos de la cerveza también se encuentran en el vino y el cava, las bebidas alcohólicas fermentadas. En cambio, no en las destiladas (vodka, ginebra, güisqui, ron ...). Hay que tener en cuenta, sin embargo, que el vino y el cava contienen más alcohol que la cerveza, por lo tanto, la cantidad ingerida en unidades debe ser inferior para que no resulten perjudiciales. A partir de los 50 mg de alcohol por día, los efectos beneficiosos desaparecen.