La Federación aparta al delegado político del Palacio

León

A Ignacio Monroy le ha salido cara su idea de aprovechar la previa de un partido de liga Asobal para, a través de un supuesto apoyo a la asociación Depcon1 (deporte y constitución), lanzar un mensaje a la politización que del deporte se ha hecho en partidos celebrados fechas atrás en Cataluña. En su condición de delegado federativo del Ademar-BM Nava del pasado viernes acordó con los clubes la lectura de un manifiesto aparentemente inocuo en su fin, aunque luego, y por sorpresa, anadió la exhibición de una pancarta ampliamente cuestionada.

La consecuencia ha sido inmediata. Monroy, que se presentó a las recientes elecciones generales como candidato de Vox al Senado por Cantabria, será apartado de forma fulminante por la Federación Española de Balonmano. Así lo confirmó el presidente Francisco Blázquez en Radio León: "se ha extralimitado tanto que hay orden directa mía para dejarlo en suspenso y para que el Comité de Competición abra el expedientte de información reservada y determine las acciones a seguir. No tenía autorización ni de la Federación ni de la Asobal".

La riada de críticas en su contra ha provocado que Monroy presentara su dimisión como presidente del Comité de Árbitros de Castilla y León, decisión aceptada por el organismo territorial que horas después del partido se desligó del comportamiento del todavía líder de sus árbitros y ex colegiado de la Asobal.

El Ademar, por su parte. explicó los hechos acaecidos desde que el día antes del partido llegara la propuesta hasta el exceso de autoridad mostrado por el delegado político Monroy. El club leonés se sintió engañado.