La ordenanza de Peñaranda de Duero de purines ya es definitiva

Peñaranda de Duero

El Ayuntamiento de Peñaranda de Duero eleva a definitiva la ordenanza del vertido de purines que aprobó inicialmente en noviembre del año pasado, una medida que viene motivada por el aumento en la actividad ganadera que está experimentando últimamente el municipio, con el consiguiente problema de incremento de olores desprendidos por esta actividad en terrenos rústicos próximos, en mayor o menor medida, al núcleo urbano. La ordenanza se planteó con la vocación de cumplir un objetivo primordial de establecer las medidas necesarias para prevenir y, en lo posible, corregir la contaminación ambiental, al eliminar la negativa repercusión en la calidad de vida en la ciudadanía que producen las molestias, incomodidades e insalubridades generadas por el tratamiento, vertido y transporte de purines, estiércoles y demás residuos ganaderos.

Esta normativa recibió trece alegaciones en su período de exposición pública, que han quedado resueltas en un nuevo acuerdo de pleno del 17 de enero. El Consistorio sólo ha admitido una de ellas, que hace alusión a una situación de excepcionalidad de una de las granjas que se encuentra arrendada a otro titular. El resto han quedado rechazadas, entendiendo que la ordenanza cumple con todos los requisitos legales y se ajusta a las directrices marcadas desde la Unión Europea para la protección del medio ambiente.