300 tractores toman Arévalo para pedir precios justos

Ávila

Unos 300 tractores y cientos de ganaderos y agricultores han salido a la calle en Arévalo, en la comarca de La Moraña, comarca cuya economía está basada precisamente en la agricultura.

Los organizadores de esta protesta, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) y la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) hablan de "día histórico" porque se ha conseguido paralizar la localidad en una movilización que no es la primera ni será la última dentro de este movimiento que reivindica precios justos para el campo.

No es un problema nuevo, porque lo que hoy cobran por sus productos es lo mismo que cobraban hace 20 años. Pero ahora la situacion es insostenible, según Nacho Senovilla, secretario provincial de UPA. "Hemos llegado ya a un punto en el que ni siquiera con las ayudas PAC, que han amortizado todo esto, llega", asegura.

Nacho Senovilla cogió la explotación agrícola de su padre en el año 1984. Ese año vendió la cebada a 34 pesetas. Se lamenta de que este año la ha vendido más barata. "Por eso estamos aquí", apostilla.

Algo ha cambiado ya con el real decreto aprobado recientemente por el Consejo de Ministros por el que se adoptan determinadas medidas urgentes para garantizar unos precios justos a los agricultores y ganaderos que cubran los precios de producción, al tiempo que eliminará la "venta a pérdidas", es decir, que se vendan productos por debajo de los costes de producción.

Pero no es suficiente para Nacho Senovilla. El secretario provincial de UPA se pregunta qué costes se utilizarán como referencia, "quién va a decir el coste que tiene producir un kilo de patatas en La Moraña o un kilo de patatas en La Rioja". Eso sí, cree que "el eslabón del productor no estaba en la cadena alimentaria" y que con este decreto se viene a reconocer su papel. "Ya tenemos eslabón en la cadena, ahora vamos a ver como conseguimos que esto tenga algún valor", dice.

Precios justos es la principal reivindicación, pero no la única. En el caso de Ávila protestan también por otros problemas como los daños que sufren las explotaciones por los ataques de lobo y por el aumento de la fauna salvaje. Jesús Muñoz, de UCCL se queja de que "ahora que están protegiendo a tantas especies, como el lobo, el buitre leonado y no sé cuantos bichos más, al final la especie en extinción es el agricultor y el ganadero". Define la situación en Ávila como "crítica".

Hoy han visto con satisfacción como ha salido a la calle a animarles. Jesús Muñoz lo resume así:  "Hemos conseguido una cosa que no habíamos conseguido antes y es que el 90% de la población ajena al sector esté con nosotros".