Obligadas a ejercer la prostitución arriesgándolas a contraer el Covid-19

Málaga

Los proxenetas están obligando a las mujeres que ejercen la prostitución en Málaga, a seguir manteniendo sexo con los clientes, a pesar de la pandemia del coronavirus y la prohibición que esta conlleva, otras mujeres se encuentran sin ningún tipo de ingreso al no poder salir de casa y no recibir ayuda alguna.

El estado de alarma está agravando la situación de vulnerabilidad de las mujeres que ejercen la prostitución o que son víctimas de trata, unas, por el riesgo de contagio del Covid-19, otras, porque no están recibiendo ninguna ayuda económica y algunas mujeres corren el riesgo de quedarse en la calle al no poder ni pagar el alquiler de su vivienda ni solicitar ningún tipo de ayuda. De momento, Cruz Roja está mediando para intentar que no dejen a ninguna mujer en la calle, pero temen que si la situación se alargue, no puedan evitar esto ni que intenten ejercer a pesar de la prohibición y el riesgo de contagio, asegura Belén Doblas, Técnica responsable del proyecto de protección apersonas en situación de trata de seres humanaos y del proyecto de intervención integral en entorno de prostitución

El servicio de Cruz Roja suele atender al año a cerca de 400 mujeres en situación de prostitución y trata. Desde que comenzó el confinamiento este número de mujeres se ha reducido a 60. A pesar de la crisis sanitaria, muchas mujeres víctimas de trata, encerradas en pisos o chalets de la capital, están siendo obligadas a ejercer la prostitución con los puteros que lo demandan, a pesar de los controles policiales.

Cruz Roja también tiene conocimiento de algunos casos en los que estas mujeres están pasando el confinamiento en casa de algunos clientes.

Aunque no puede asegurarlo al 100 por 100, la técnica de Cruz Roja, cree que puede haber mujeres confinadas en muchos prostíbulos

De momento, no tienen constancia de que algunas de las mujeres a las que atienden se hayan infectado del Covid-19, pero sí conocen casos con cuadros asintomáticos a las que no les han hecho el test del Covid y no descarta que muchas puedan infectarse de coronavirus.

Actualmente están realizando repartos de alimentación e higiene y prestándoles ayuda psicológica y jurídica.