La incineradora de Valdemingómez lleva destruidas 90 toneladas de residuos sanitarios del coronavirus

Madrid

La directora general de parque tecnológico de Valdemingómez en el Ayuntamiento de Madrid, María José Delgado, ha explicado a la Cadena SER cómo es el tratamiento de estos residuos contaminados de acuerdo con las normas establecidas tanto por el Ministerio de Sanidad como por las que ha dado el Ministerio de Medio Ambiente.

La técnico de la comunidad reconoce que "se ha producido un incremento exponencial en la generación de estos residuos. Antes de la crisis sanitaria se podrían estar generando alrededor de 10 toneladas de residuos sanitarios mientras que ahora se ha incrementado en torno a las 15 toneladas diarias y habido picos de hasta 30 toneladas".

Incineradora de Valdemingómez

A la incineradora de Valdemingómez han llegado desde el lunes 6 de abril unas 90 toneladas de residuos. Estas 90 toneladas, asegura Delgado, "son excedentes de residuos hospitalarios que no pueden ser destruidas en plantas habituales de tratamiento cuya capacidad diaria se sitúa en torno a las 50 toneladas. En estos instalaciones el material infectado para por un primer tratamiento de esterilización, después trituración y compactación y, finalmente, su depósito en el vertedero".

Tres plantas

En la Comunidad de Madrid hay tres plantas de tratamiento de residuos que siguen operativas para la destrucción de material sanitario contaminado y la capacidad de estas plantas se encuentra entre los 45 y las 50 toneladas diarias. Una capacidad suficiente para situaciones normales pero que "en estas circunstancias se han visto desbordas de ahí que la Comunidad de Madrid haya autorizado a la planta de incineración de Valdemingómez para que asuma únicamente los excedentes que no puedan asumir las plantas que habitualmente tratan estos residuos", según reconoce María José Delgado.

En este sentido, Delgado precisa que la CAM "también está otorgando autorizaciones temporales de almacenamiento de manera que estas empresas gestoras de residuos sanitarios pueden almacenar provisionalmente los excedentes hasta su destrucción". Es decir, "lo que está llegando a Valdemingómez sería aquello que no pueden asumir las plantas de tratamiento habitual y lo que excede del almacenamiento temporal autorizado por la comunidad de Madrid con carácter excepcional". Este almacenamiento temporal permite descargar la actividad de estas plantas de tratamiento habitual de manera que puedan ir asumiendo progresivamente las tareas de tratamiento y destrucción normales.

Cómo se tratan estos residuos

Los residuos que se generan en los hospitales "los tienen que separar en los propios centros sanitarios fundamentalmente en dos categorías esenciales: aquellos residuos que son similares a los urbanos que son recogidos por los propios servicios municipales de limpieza y aquellos residuos que son específicos de los hospitales, denominados residuos clase 3 que son los potencialmente peligrosos". Estos residuos se tienen que gestionar por transportistas y gestores específicos y la atención la sumen los hospitales. Que son los que contratan a estas empresas.

Residuos contaminados

Los residuos que son potencialmente infecciosos normalmente se reciclan en plantas de tratamientos mediante autoclaves donde son esterilizados, triturados y después compactados. Sin embargo, según explica la directora del parque tecnológico, "esta etapa con el incremento exponencial, hemos tenido que modificar la autorización de tratamiento de la incineradora del parque tecnológico de Valdemingómez donde habitualmente se dedicaba la gestión de residuos municipales para que pueda incinerar estos residuos sanitarios clase 3".

Precauciones

Hasta que termina todo el proceso y se incineran los restos, hay dos técnicos especializados supervisando este trabajo y además la planta ha designado a un responsable que está supervisando que la combustión en el horno se produce en todo momento de manera adecuada y que las emisiones están dentro de los límites habituales. Además hay dos equipos especializados en Seguridad.

Llegada de material

La llegada de estos residuos a la incineradora de Valdemingómez se produce durante un tiempo limitado a lo largo del día y aunque la incineradora funciona las 24 horas estos residuos sanitarios están llegando conjuntamente en un solo turno de manera que pueda gestionar y acomodar el proceso aún determinado espacio temporal.

Los residuos llegan a la incineradora de Las Lomas del Parque Tecnológico de Valdemingómez en bolsas cerradas que se depositan en un foso independiente (del resto de residuos que son municipales), desde el cual con un pulpo se alimenta el horno en el que se queman los residuos a más de 900 grados centígrados.

El residuo que se introduce en los hornos actúa como un combustible que genera calor. Esta energía se recupera mediante una caldera que convierte ese calor en vapor de agua a presión y una turbina lo transforma en energía eléctrica. Con esta energía se alimenta la propia planta y el excedente se transmite a la red eléctrica. En total se obtienen al año unos 220.000 megavatios hora (MW/h).

Medidas de seguridad

La instalación cuenta con un sistema de depuración de gases, provisto de ciclones, filtros y eficientes catalizadores, que permiten reducir la emisión de gases a la atmósfera hasta valores muy por debajo de los límites legales exigibles.

Además de estas medidas de carácter general que se encuentran operativas siempre durante el funcionamiento de la incineradora, con motivo del tratamiento de los residuos sanitarios se han establecido medidas específicas de seguridad:

• La utilización de los equipos apropiados de protección para el tratamiento de estos residuos.
• Los residuos sanitarios son tratados únicamente en una de las tres líneas de incineración para minimizar los elementos que entran en contacto con estos residuos, y durante un horario limitado durante determinadas (3-4) horas al día.
• Durante todo el proceso de alimentación del horno con estos residuos están presentes dos operarios de las empresas gestoras de residuos sanitarios, cualificados para la gestión de esta clase de residuos sanitarios.
• Tras la descarga y el tratamiento de estos residuos se limpian y desinfectan todos los equipos y elementos que han estado en contacto con estos residuos (pulpo, zona de descarga, retro-pala, camión…)

Desinfección

Después del proceso de destrucción e incineración de los residuos, la planta se limpia cada día, reconoce Delgado, y se "desinfectan todos los elementos que hayan estado en contacto con los residuos como la plataforma de descarga, el pulpo (que recoge el material y lo transporta hasta el horno) y también las personas que han tenido contacto con el residuo sanitario".

Los gases contaminantes

La incineradora de Valdemingómez tiene un control de gases muy estricto para lo que están previstos filtros y catalizadores. En la incineradora hay tres líneas de quemado y cada una cuenta con su propio catalizador. Según la técnico de la comunidad, "nos estamos manteniendo siempre muy por debajo de los límites legalmente exigibles tanto a nivel estatal como comunitario".

Cementeras

Las cementeras tienen también una sección incineradora que sirvió, por ejemplo, para la destrucción de restos en la denominada crisis de las "vacas locas" pero ahora su intervención es prácticamente nula. Por una parte, porque no están operativas porque han cerrado provisionalmente debido al estado de alarma, pero fundamentalmente porque se trata de un tipo de residuos que llegan en bolsas y resulta más complicado de verter en los hornos.

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