El Ampa del Fray Juan de la Cruz rechaza que Magisterio se convierta en un centro de pacientes de COVID-19

Segovia

El Ampa del colegio Fray Juan de la Cruz “ Aneja “ ha manifestado su profundo malestar por la intención de instalar un centro dedicado a pacientes COVID-19 en la antigua escuela de Magisterio. La información la desvelaba acueducto2.com al asegurar que el edificio Vicerrector Santiago Hidalgo se convertirá a mediados de octubre en un “ centro sucio “ destinado a la prestación de servicios de Atención Primaria para pacientes COVID de los cuatro centros de salud de Segovia

A través de un comunicado muestran su más profundo rechazo a esta posible ubicación del “ centro sucio “. Consideran que está decisión sería irresponsable por la cercanía del colegio y aseguran que no dudarán en realizar cuantas movilizaciones y acciones sean precisas.

Éste es el comunicado íntegro :

Sin duda, debe haber habido algún error en esta notificación, pues no es posible que instituciones como la Universidad de Valladolid y la Junta de Castilla y León vayan a llevar a cabo semejante disparate, o que la Subdelegación del Gobierno y el Ayuntamiento no sean conocedoras del tema y no se opongan al mismo.

Si se instala el mencionado “centro sucio” la cercanía inevitable será la que se produzca con nuestros niños y niñas, pues compartirán la entrada por la verja que da acceso al edificio. Los pacientes COVID realizarán, además, el mismo camino por el que se accede no solo a nuestro centro escolar, sino también al cercano colegio concertado de las Madres Concepcionistas. A esta situación se añade que desde el Ayuntamiento se nos ha comunicado que se va a cortar el acceso al centro durante tres o cuatro meses, por las obras que se van a realizar en la calle Taray y en la plaza de Colmenares, lo que haría aún más inevitable la cercanía entre personas enfermas de COVID y niños y niñas, sus familias y el profesorado. Es increíble que todo esto no se tenga en cuenta a la hora de decidir la localización de este servicio.

Instamos, pues, a los responsables de las instituciones, al Delegado Territorial de la Junta de Castilla y León, al Vicerrector del Campus de la Universidad de Valladolid, a la Alcaldesa de la ciudad y a la Subdelegada del Gobierno a que se pronuncien y desmientan este despropósito sanitario que pone en riesgo la salud de nuestra comunidad educativa, porque, de ser cierto, nos encontraríamos ante una conducta irresponsable y frívola contra la que no dudaremos en realizar las movilizaciones y acciones que sean precisas. Nos va en ello la salud y el futuro de nuestros hijos.