El Instituto María Zambrano de El Espinar celebra su 50 aniversario

Segovia

Hace 50 años comenzó a sonar el timbre en el Instituto María Zambrano de El Espinar. Primero como extensión del Mariano Quintanilla, luego del Andrés Laguna, y en 1985 se declaró independiente. Desde su inauguración, las cosas, claramente han cambiado. Sobre todo en el número de personas que podían estudiar. En 1970 había unas 6 clases y 150 alumnos aproximadamente. Ahora, en 2020, la cifra de alumnos asciende hasta casi 500 que se reparten en 29 clases.

La creación del instituto en este municipio segoviano supuso que a muchos espinariegos y espinariegas les cambiara la vida. Supuso un cambio enorme, brindó una oportunidad a los jóvenes de formarse sin salir de su pueblo.

José Luis Esperanza fue primero alumno, en los inicios del instituto, después profesor, y ha sido durante 18 años director del centro: “A los que intentamos aprovechar ese momento nos cambió la vida. A mí me cambio la vida”, decía José Luis. Y proseguía señalando la importancia del Instituto respecto al abandono escolar: “a la gente se le brinda la oportunidad de formarse sin salir de su municipio, sin que tuviese un coste añadido, entonces hay mucha más gente que empieza a estudiar. Y lo que ahora es impensable, bueno, o no deseable, que alguien abandone el sistema educativo, con una edad de 12 o 13 años antes se producía con una facilidad pasmosa”

La llegada del instituto trajo consigo un cambio social para El Espinar y para su entorno. Permitió a los jóvenes del municipio y de las localidades colindantes, poder acceder a la educación secundaria sin tener que desplazarse. Hemos charlado con dos alumnos actuales del centro que están en segundo de bachillerato. Iván López Navarro y Mercedes Jiménez López creen que la cercanía y la confianza son los aspectos a destacar de estudiar en un instituto de pueblo

Iván comenta que “es bastante impresionante pensar que mis padres se educaron en este instituto, que me cuente cómo era en ese momento y pensar que se ha mantenido tanto tiempo… Es una sensación curiosa, le da más cariño y familiaridad al Instituto. Hay profesores que mis padres han tenido entonces ya te establece una cierta cercanía”.

Mercedes piensa que la adaptación es más sencilla en un instituto así “una cosa muy importante que creo que tienen los centros de los municipios es la confianza. Porque a pesar de que ahora hay más alumnos, te sigues conociendo con la gente. Entonces creo que es más fácil llevarlo que a lo mejor en un centro de Madrid que seáis 800 en el centro y no conozcas a casi nadie y veas a profesores que luego nunca vayas a ver”

Elisa Yagüe ha estado siempre vinculada al centro, es ahora profesora, pero también fue alumna. Ella cuenta las diferencias que encuentra de las épocas que ha vivido en el Instituto: “Lo que noto es que hay mayor volumen de alumnado, y al ser menos se podían hacer más cosas. Ha cambiado. Quizás este todo más cuadriculado de alguna manera. Echo de menos que exista solo literatura”

La organización del centro tenía múltiples actividades programadas para la celebración, pero muchas de ellas se han cancelado como nos cuenta la directora actual del centro, María del Corral. “Todas las ideas que había que implicaban concentrarnos se quedaron en preparación y suspense en marzo y ahí seguimos, con la esperanza de que si no se puede hacer este año, se podrá hacer en el 50+1 o en el 70 aniversario o cuando se pueda”, señalaba la directora. María cree que lo importante del instituto de El Espinar, es que a los jóvenes de este municipio Segoviano se les pueda brindar las mismas oportunidades que en otros lugares “para mí el que el centro cumpla 50 años es algo más secundario. Para mí como directora y como docente lo importante es que nuestros chicos tengan las mismas oportunidades que cualquier centro de Segovia capital o de Madrid”.

50 años en los que miles de alumnos han cumplido sus sueños por el hecho de la creación de este centro. 50 años de una educación familiar y cercana, de una educación que nada tiene que envidiar a otros centros de grandes ciudades. 50 años de avance social para el municipio y su entorno. Por eso os damos la enhorabuena. Que sigáis formando y educando por muchos años más. Y que sea cuando sea, la celebración que este año no se ha podido llevar a cabo, se realice por todo lo alto.