Polémica en Asturias por la vacunación del presidente del Montepío de la Minería: "Fue por obligación moral"

Asturias

El presidente del Montepío de la Minería Asturiana, Juan José Pulgar, recibió la vacuna contra el COVID-19 pocos días después de que empezasen a suministrarse las dosis "por obligación moral" con los usuarios del geriátrico que gestiona la mutualidad en la localidad de Felechosa, en el municipio asturiano de Aller.

Pulgar aparecía vacunándose en una fotografía difundida el pasado 30 de diciembre a través del perfil del Montepío en una red social junto a la leyenda "Porque las vacunas salvan vidas", una imagen que generó críticas entre los cibernautas que han provocado, a juicio de los responsables de la mutualidad minera, "una polémica falsa y falseada".

Según ha señalado el Montepío en un comunicado, que impulsó la construcción y puesta en marcha del geriátrico con cargo a los fondos mineros en una operación que está siendo investigada por los tribunales, Pulgar "acude de manera rutinaria cada semana" a estas instalaciones y mantiene reuniones de trabajo con trabajadores y residentes.

De esta forma, considera que estaba justificado que se le suministrase la primera dosis atendiendo a la Estrategia de vacunación de personas residentes y trabajadores de los centros residenciales de mayores y recuerda que el ex secretario de organización del sindicato minero SOMA-UGT no tiene actualmente responsabilidades políticas ni es cargo público.

Además, incide en que las autoridades sanitarias pidieron en diciembre información de todas las personas que acceden y trabajan a diario o con frecuencia semanal en la residencia "sean sanitarios o no" y que se hiciese constar además su aceptación o rechazo a la vacuna.

Según el Montepío, los criterios del proceso de vacunación en las residencias afectaban de manera doble a su presidente tanto "por la obligación moral y legal de vacunarse por su presencia en la residencia" como por la necesidad de hacerlo "a pesar de haber padecido la covid en marzo y ante la falta de garantía hoy en día de estar inmune".

"Negarse a poner la vacuna sería un mal ejemplo para los dudosos, pero mucho más grave poder ser el causante de un brote de covid en la residencia", señala la mutualidad que incide además en que la directora del centro no cumple las condiciones médicas para vacunarse por su intolerancia a los componentes de la vacuna y el consiguiente riesgo de shock anafiláctico.

Así, aseguran, la vacunación de Pulgar "suponía una mayor necesidad para garantizar su presencia diaria en las instalaciones si fuera necesario" y subrayan que, al publicar la fotografía de Pulgar y de otros trabajadores en las redes sociales, "no se escondía nada porque sencillamente no hay nada que esconder" y que esa decisión se adoptó para colaborar en hacer frente a las dudas que en ese momento en el inicio de las vacunaciones en España.