Bilbao estudia varias ubicaciones en la periferia para el centro logístico de última milla

Bilbao

La pandemia ha supuesto un punto de inflexión para muchas cosas, también ha alterado de manera importante la movilidad. No solo por las retincencias al uso del transporte público, otros hábitos que han llegado para quedarse como el auge del comercio online están afectando ya al tráfico en la ciudad. "La movilidad de las personas la tenemos más o menos controlada, pero la que se ha disparado e incluso, ha llegado a disparatarse, es la movilidad de las mercancías. Ya no son los grandes centros logísticos los que mueven mercancías, también va a ser el comercio de proximidad", explica el concejal Alfonso Gil.

La apuesta por la digitalización y la venta online por parte del comercio local es inequívoca, y el Ayuntamiento está apoyando de manera decidida esa vía como parte de la supervivencia del sector. Pero toca contrarrestar el efecto que el trasiego de furgonetas va a tener en las calles de la ciudad. "Necesitamos ordenar y hacer más eficiente ese tráfico", sostiene Gil.

Tras analizar experiencias de otras ciudades se ha descartado la opción de habilitar un centro logístico de última milla en el centro. "Es un error que han cometido otras ciudades. Se ha demostrado que ha sido un fracaso", apunta el concejal. Se están analizando varias ubicaciones municipales en la periferia, "queremos que las mercancías se queden en las entradas".

Allí llegarían los trailers y harían el "transbordo" de la mercancía a vehículos eléctricos para desplazarse por la trama urbana. Ése es el objetivo que ha empezado a tomar forma con las primeras diez furgonetas "verdes" que ya están en circulación, cuya compra estuvo subvencionada por el Ayuntamiento con 7.000 euros cada una. Este año se reedita esta ayuda con 100.000 euros.

Están geolocalizadas y no pueden salir del término municipal. Están sirviendo como banco de prueba para analizar los recorridos y los tiempos desde ese futuro centro logístico, que está todavía por definir. "Esas furgonetas tienen un rango de autonomía de 300 km, teniendo en cuenta que Bilbao tiene de extensión 41 kilómetros cuadrados le podríamos dar varias vueltas".