Cereal, olivar, viñedo, lentejas, esquileo: tres momentos actuales del campo de Cuenca

Cuenca

En los primeros días del verano, con tiempo inestable por las tormentas y temperaturas bajas para la época que no superan los 25º de máxima, a la espera de que entre con fuerza el calor y la estabilidad del mes de julio, el campo de Cuenca continúa su actividad en distintos frentes. En Hoy por Hoy Cuenca hemos hablado con Jesús Castillo, de Villamayor de Santiago; Fernando Huete, de Villalba del Rey, y César Sánchez, de Zarzuela. Todos ellos pertenecen a Asaja Cuenca y nos han contado las faenas agrícolas o ganaderas que llevan a cabo estos días como la siega de lentejas o de cereal, labores en el olivar o en el viñedo y el esquileo de las ovejas. Lo podéis escuchar a continuación:

Jesús Castillo, que es presidente de Asaja Joven en Cuenca, está estos días segando lenteja castellana en sus campos de Villamayor de Santiago. Espera un rendimiento “variable dependiendo de la parcela, de entre 500 a mil kilos por hectárea, debido a las heladas”, dice. Lo que sí tiene mejor perspectiva de campaña es el viñedo al que le han pasado estos días el cultivador “para quitar hierbas y darle un poco de humedad a la planta”, explica, a la espera de que el verano y el calor favorezcan el crecimiento y la maduración óptima de las uvas.

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En campos de la Alcarria, en Villalba del Rey, Fernando Huete está terminado los tratamientos del olivar.

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“Les echamos un complemento de cobre”, dice, y nos cuenta cómo muchos árboles sufrieron las heladas de enero y han tenido que podarlos especialmente para que se regeneren. De esos árboles esperan poca producción este año, mientras que, dice, “es pronto para valorar cómo será la campaña en los olivares que no se vieron afectados por Filomena”. También tiene pendiente la siega de las cebadas y trigos, pero esperará “a la semana que viene a ver si entra el calor y terminan de secarse las espigas”.

En Zarzuela, en la Serranía de Cuenca, esquila sus 600 ovejas (también tiene 200 cabras) César García que, junto a su hermano, son de los pocos ganaderos que se encargan de hacer esta labor a su propio ganado. “Debemos ser de los pocos de España que esquilamos”, dice, y explica que la labor del esquileo, en los últimos años, “la desarrollan temporeros de nacionalidad uruguaya o rumana”. En el campo, tras la primavera, los pastos están crecidos y los pastores esperan que avance la siega por estos pueblos de la sierra para aprovechar las rastrojeras.

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