El acuífero de Son Reus presenta un alto nivel de metales pesados en sus aguas
La empresa municipal por su parte niega que el agua esté contaminada
Palma
El juzgado de instrucción 12 de Palma está investigando las responsabilidades penales producidas por la contaminación provocada de los vertidos emitidos por las filtraciones del vertedero que se encuentra en la superficie. El informe encargado al Instituto Geológico y Minero de España (IGME) se inició en 2015 y terminó en 2019. En este han detectado once metales pesados perjudiciales y superan el límite establecido por la normativa de agua para el consumo humano. Aunque Emaya niega que el vertedero contamine el subsuelo.
Dentro del convenio con el Govern, Emaya tiene la responsabilidad de realizar todos los análisis pertinentes y los procesos de seguimiento de las aguas para comprobar su calidad. La empresa municipal, de hecho, fue la encargada de ordenar el estudio. Ramón Perpinyà, regidor de Medi Ambient, defiende que los procesos de seguimiento son correctos.