Los dos jóvenes vascos aislados en Malta por un brote de unos 70 positivos en coronavirus vuelven a España

San Sebastián

Los dos jóvenes vascos de 16 años que llevaban aislados en La Valeta desde el pasado 12 de julio por un macrobrote vinculado a unos cursos de inglés ya están en suelo español. El donostiarra Paul Fernández y la bilbaína Lucía Paliza han aterrizado a primera hora de la tarde en el aeropuerto de Barajas en un avión fletado por la embajada española de Malta.

Los jóvenes han volado desde Malta en una aeronave con servicio médico después de que la embajada contactase a lo largo del jueves con todos los jóvenes que estaban aislados en un hotel de La Valeta. Los chicos, en torno a unos 70 sumando españoles y extranjeros, llevaban aislados desde el pasado 12 de julio a causa de ese brote. Quienes habían dado negativo ya habían sido trasladados varios días atrás, pero no ha sido hasta este viernes cuando los positivos han sido trasladados de vuelta a España.

El evento que había reunido a los jóvenes en la isla mediterránea había sido un curso de inglés en un colegio maltés organizado por varias agencias. Allí coincidieron jóvenes de distintas puntos de España y también de países como Italia o Francia. Según ha explicado la bilbaína Lucía Paliza, en el hotel donde se alojaron los menores españoles sí que cumplieron con las medidas de prevención contra la COVID-19, pero "un grupo de italianos iba siempre sin la mascarilla y nadie les decía nada".

Las familias de los menores españoles consultadas por Radio San Sebastián, de puntos tan diversos como Cantabria, Zaragoza, Valencia o Bilbao, viajaron a Malta con tests negativos de coronavirus. Los jóvenes, apuntan los padres de los menores, "tienen que haberse contagiado allí". Tanto los familiares como los propios jóvenes denuncian no haber sido atendidos correctamente en el hotel y que eran los monitores del curso de inglés los que hacían las gestiones necesarias para conseguir productos como medicamentos para tratar las infecciones por coronavirus, cambiar las sábanas de las habitaciones donde realizaban la cuarentena o conseguir escobas para barrer las estancias.

Tras varios días de diálogo con las autoridades maltesas y españolas ha sido la embajada la que ha habilitado el avión con servicio médico para repatriar a los jóvenes. En el aeropuerto de La Valeta los menores han seguido un protocolo especial para los casos positivos por coronavirus. Las autoridades maltesas, según explicaba Lucía Paliza, no habían dado por concluido el confinamiento de los menores pese a que se habían cumplido los diez días desde su diagnóstico positivo.